Los ministros de Agricultura de la Unión Europea (UE) celebrarán este martes a las 12 h (GTM) una reunión extraordinaria -estaba prevista para el día 17, pero han decidido adelantarla- para discutir ayudas al sector hortofrutícola tras el brote de bacteria E.coli detectado en Alemania, según fuentes comunitarias.

La intención de la Comisión Europea sería la de presentar una serie de ideas de apoyo al sector, como ayudas a la intervención de la producción o la autorización de subsidios públicos a los productores, si bien este extremo no ha sido confirmado aún. La reunión ha sido convocada por la presidencia húngara de turno para tratar los problemas de los productores y también de la comercialización en el exterior, después de los bloqueos de Rusia y otros países a las hortalizas comunitarias.

Además, esta reunión extraordinaria discutirá también cuestiones sobre sanidad alimentaria que ha suscitado el brote, aunque el alcance de este debate dependerá de cómo avancen los análisis en Alemania sobre las causas del brote. Las últimas sospechas de las autoridades alemanas apuntan como posible origen de la contaminación a una instalación agrícola de su país, si bien los resultados definitivos de los análisis no se conocen.

"Hasta ahora seguimos sin saber con certeza cuál es la causa o si está relacionada con un producto alimentario", añadieron las fuentes comunitarias.

Un portavoz de la presidencia húngara, Márton Hajdú, explicó que los comisarios europeos de Agricultura, Dacian Ciolos, y de Sanidad y Consumo, John Dalli, han sido invitados a participar para exponer a los ministros la situación en sus respectivos ámbitos.

Por otro lado, la ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, se reúne este lunes en Luxemburgo con el comisario de Sanidad, John Dalli, y los ministros húngaro y alemán de Sanidad, a fin de analizar la situación desde el punto de vista epidemiológico y de seguridad alimentaria.

Ambos encuentros bilaterales coincidirán con la reunión del Consejo de la Unión Europea de Empleo, Asuntos Sociales, Salud y Consumo (EPSSCO), al que también asistirá la ministra, para pedir que se mejoren los criterios de admisión de alertas procedentes los Estados Miembros.

Asimismo, tras estas reuniones, el martes se ha convocado a los directores generales de Salud Pública y Seguridad Alimentaria de las comunidades a una reunión conjunta de las denominadas comisiones Institucional y de Salud Pública del Consejo Interterritorial de Sistema Nacional de Salud (CISNS). El objetivo de la misma es informar de las conclusiones del Consejo Europeo EPSCO y trabajar en el diseño de un mecanismo de coordinación para preparación y respuesta.

"Espero una discusión concreta y fructífera sobre esta importante cuestión", ha dicho en un comunicado el comisario de Sanidad, John Dalli, "con la esperanza de que podamos consolidar nuestros esfuerzos para hacer frente al brote de E. coli.

Dalli ha exigido a las autoridades alemanas que intensifiquen el trabajo para detectar el origen del brote, que según el responsable de Agricultura del estado de Baja Sajonia, Gerti Lindemann, se encontraría una granja alemana de brotes de soja.

Las autoridades españolas han criticado a Alemania por culpar a los pepinos españoles sin pruebas y han lamentado lo que consideran reacción tardía del Ejecutivo comunitario. El mercado europeo se ha reabierto a las verduras españolas después de que todos los análisis realizados en Alemania y España demostraran que los pepinos españoles no son el origen del brote.

Pero varios países, empezando por Rusia, han prohibido la importación de verduras procedentes de la UE hasta que se aclare la situación. El Ejecutivo comunitario ha tachado de desproporcionados estos embargos y ha reclamado que se levanten de inmediato. España y otros Estados miembros cuyo sector agrícola se ha visto golpeado por la crisis han exigido compensaciones a la UE.