Nueve de cada diez niños asturianos no se consideran diferentes a los inmigrantes, según un estudio de Aldeas Infantiles

Nueve de cada diez escolares asturianos consideran que los niños de otras nacionalidades tienen sus mismas necesidades y, aún siendo diferentes, están dispuestos a aprender mucho de ellos.

Las conclusiones se extraen del estudio 'Sumando valores: Bondad + Diálogo = Paz', realizado por Aldeas Infantiles SOS a un total de 233 niños y niñas asturianos y que se enmarca dentro de su programa educativo 'Los Valores desde Aldeas Infantiles SOS', para mostrar el comportamiento y las percepciones de los más pequeños con respecto a estos valores.

En concreto, el 69 por ciento de los niños cree que sus compañeros de otras nacionalidades y culturas no difieren en cuanto a necesidades y exigencias, y un 21 por ciento percibe que son una fuente de la que extraer nuevos aprendizajes. Tan sólo un 6 por ciento los considera diferentes.

Según revela la encuesta llevada a cabo por Aldeas Infantiles SOS, un 60 por ciento de los escolares asturianos encuestados piensa que usando la palabra y el diálogo es más fácil conseguir sus objetivos que si se enfadan o gritan. De la misma manera, el 63 por ciento defiende que la buena conducta es necesaria para sentirse bien. A pesar de ello, el 92 por ciento de los encuestados considera que su comportamiento es "generalmente malo" o "un poco malo", frente a un 8 por ciento que reconoce portarse siempre bien.

A la pregunta "¿Con quién eres más bondadoso?", un 59 por ciento responde que son sus amigos los destinatarios de sus máximas atenciones. El 31 por ciento prefiere a sus padres y abuelos, seguido del medio ambiente y, en última instancia, se encuentran sus profesores.

La familia cobra especial relevancia cuando se trata de peticiones o deseos. A la hora de escribir la carta a los Reyes Magos, el 43 por ciento pide también regalos para los suyos, un 27 por ciento piensa en las personas más necesitadas, mientras que un 30 por ciento piensa en sí mismo y en sus pretensiones.

Además, casi la mitad de los pequeños, un 44 por ciento, se siente más cómodo para dialogar con sus padres, mientras que un 37 por ciento prefiere a sus abuelos y a sus amigos. Tan sólo un 4 por ciento prefiere a sus profesores.

En este sentido, los padres son, para un 77 por ciento de la muestra estudiada, las personas que más esfuerzo hacen para conseguir una vida y un mundo mejores, seguidos de la Iglesia, con un 13 por ciento, y los políticos y los profesores, con un 3 por ciento.

Cuando se trata de prestar ayuda a un compañero, el 69 por ciento la ofrece desinteresadamente, mientras que el 14 por ciento espera una contraprestación en el futuro. El 16 por ciento prefiere comentárselo a un adulto para que éste le ayude mejor a resolver el problema.

Durante el curso 2009-2010, participaron en el programa 400.200 niños de 4.002 centros educativos de toda España. De los mismos, 13.000 eran alumnos procedentes de 130 centros asturianos.

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