Desmontando algunos mitos sobre la Iglesia

• En nuestra sociedad existen muchas creencias incorrectas en torno a la Iglesia, la mayoría son debidas a la falta de información y el desconocimiento.

No todo lo que la gente cree saber es cierto. Para afirmar algo con seguridad es necesario, primero, comprobarlo e investigar de dónde y por qué puede venir esta creencia. A continuación, se presentan algunos mitos que se han ido estableciendo en la sociedad como verdades irrefutables sobre la Iglesia pero que, en realidad, no son ciertos.

1.El Estado paga miles de millones de euros a la Iglesia Católica cada año.

La realidad es que la Iglesia no tiene ninguna asignación en los Presupuestos Generales del Estado desde el año 2007. Desde ese año la Iglesia recibe únicamente el 0,7% de los impuestos de aquellos que marcan la casilla de la Iglesia en la Declaración de la Renta.

De esta forma, y como se puede comprobar en www.portantos.es, en los últimos años la Iglesia ha recibido unos 250 millones de euros; provenientes de aquellos contribuyentes que han decidido marcar voluntariamente la casilla de la Iglesia en la Declaración de la Renta.

Del total del dinero con el que la Iglesia desarrolla su labor, solo el 25% proviene de la recaudación tributaria. El otro 75% corresponde a colectas y donativos que se realizan en las parroquias, suscripciones periódicas, herencias, legados, etc.

2.El Estado subvenciona los colegios concertados

Los colegios concertados reciben una cantidad de dinero por cada alumno por su condición de ser colegios, no porque sean instituciones religiosas. Además, ese dinero tiene un destino claro, que es el propio colegio, y no la Iglesia.

3.Solo la Iglesia católica tiene presencia en los hospitales

La religión forma parte intrínseca de lo más profundo del ser humano, por ello es un derecho de toda persona poder ser atendida en el aspecto religioso. Es cierto que muchos de los hospitales tienen capellanes para atender las necesidades religiosas de los enfermos. Pero no se trata de un privilegio exclusivo de la Iglesia católica, sino que es un derecho de toda persona ser atendida en su fe y en sus creencias. Lo que sucede es que un elevado porcentaje de la población española es católica, de ahí que la presencia de la Iglesia católica sea mayor y, por lo tanto, más visible, que la de otras confesiones religiosas.

4.La Iglesia tiene grandes beneficios fiscales y privilegios

La Iglesia católica no tiene ningún privilegio fiscal (a excepción del ICIO), y es que está sometida al régimen fiscal general, y en las mismas condiciones que otras entidades sin fines lucrativos por la Ley de Mecenazgo. Esa es la explicación de la exención del IBI que está regulada por esa Ley pero en las mismas condiciones y exactamente igual que todas las oenegés y otras asociaciones, fundaciones, instituciones o que las comunidades hebrea o musulmana.

5.Solo el 2% del dinero de la Iglesia va a parar a Cáritas

Se trata de una creencia falsa muy extendida. En primer lugar, cabe señalar que Cáritas y la Iglesia son lo mismo y, por eso, no se puede decir que dé más o menos dinero la Iglesia a Cáritas. Además, que en torno a un 65% del dinero de Cáritas procede de la misma Iglesia: de las colectas en parroquias, de donativos, etc. Además, toda la labor de Cáritas se desarrolla en el ámbito parroquial, en las mismas salas de las parroquias, con voluntarios de las mismas parroquias, etc.

El dinero con el que Cáritas desarrolla su labor es fundamentalmente: el que cada diócesis destina a ese fin; el que también cada parroquia destina; el que recibe de la casilla de la Iglesia en la Renta; el que recibe de la casilla de Otros Fines de Interés Social y que depende de los proyectos concretos que haya presentado para su desarrollo. Así pues, cabe, repetimos, que aproximadamente un 65% del dinero de Cáritas procede de la Iglesia, dato que aparece en la Memoria Económica de Cáritas como “Fondos Privados”, para poder diferenciarlos de los “Fondos Públicos”.

6.El dinero que recibe la Iglesia a través de la Declaración de la Renta va a parar a los curas

El dinero obtenido a través del 0,7% de los impuestos de aquellos contribuyentes que marcan la casilla de la Iglesia en la Declaración de la Renta, es distribuido por la Conferencia Episcopal a las 70 diócesis españolas contando el Arzobispado Castrense. Para el reparto a cada una, se tiene en cuenta la extensión, el número de parroquias, la cantidad de sacerdotes, los habitantes… En definitiva, se trata de ofrecer más dinero, y de manera solidaria, a aquellas diócesis que tengan más dificultades para su sostenimiento.

Una vez repartido, cada diócesis configura su economía según los ingresos y gastos que tenga que afrontar. La mayor parte del dinero se destina a actividades asistenciales y pastorales pero depende fundamentalmente de la realidad de cada diócesis.

La realidad indiscutible es la gran labor que lleva a cabo la Iglesia católica para la sociedad española. Por eso, es fácil y factible colaborar con todos los proyectos y tareas que desarrolla esta institución, solo es necesario marcar las dos X en tu Declaración de la Renta . No te costará esfuerzo alguno, ni te supondrá ningún perjuicio, puesto que no tendrás que pagar más ni te devolverán menos.