El panorama de la Fórmula 1 apenas ha consumido tres días de pretemporada oficial, a la primera sesión de entrenamientos libres aún le resta una cuarta jornada este miércoles y al arranque del campeonato aún le queda algo más de un mes. Pero los ensayos de Jerez de la Frontera se están fraguando dudas y certezas a partes iguales.

Las dudas las concentra McLaren, que en estos tres primeros días en Jerez solo ha completado 44 vueltas en total pese a que nadie dentro de la escudería enciende las alarmas y emplaza toda valoración a los entrenamientos de Barcelona. Las certezas vienen del equipo campeón, tanto en pilotos como en constructores: Mercedes es fiable. Y siguiendo su estela, también Williams.

En un punto intermedio están Ferrari y Red Bull. La escuadra italiana, que ha firmado los mejores tiempos los dos primeros días con Vettel, evidencia mejorías sustanciales que ahora esperan el refrendo de los grandes premios. Red Bull, que en 2014 fueron los únicos capaces de batir a Mercedes, no ha mostrado un avance significativo. De momento.

Las incógnitas principales sobrevuelan Woking después de que el nuevo monoplaza de McLaren apenas completase seis vueltas en sus dos primeras jornadas (el domingo con Alonso al volante, Button el lunes) y este martes, tras sus 32 giros matutinos con el asturiano al mando, se retirase por un problema eléctrico (un fallo en el sistema de refrigeración, apuntan otras fuentes) y diese por concluida su jornada con media hora de adelanto al horario oficial.

Las balas de plata, cuya gran novedad para este curso más allá de soluciones aerodinámicas concretas estriba en el montaje de motores de la japonesa Honda, no han podido mostrar ninguna de sus bondades por esta falta de continuidad en el trazado jerezano, una carencia que cuestiona la fiabilidad del MP4-30 pese a los empeños de la escudería por relativizar la situación y recalcar que ahora es el mejor momento para aventurarse en riesgos.

“¿Hemos asumido algunos riesgos técnicos controlados? La respuesta es sí. Están relacionados con tecnologías que hemos sido los primeros en desarrollar y vamos a trabajar duro para lograr ventaja en su rendimiento”, valoraba estos días Ron Denis desde Jerez de la Frontera. Cuando estás por detrás en cualquier deporte, para alcanzar a los de delante tienes que correr más que ellos, de lo contrario será imposible”. En McLaren, además, se recuerda que las conclusiones tienen que comenzar a sacarse en los ensayos de Barcelona, cuando se pruebe el perfil del vehículo para la competición.

Sebastian Vettel, el gran movimiento del mercado de fichajes con permiso de Fernando Alonso, no ha pasado desapercibido en sus primeros días como piloto de Ferrari. El tetracampeón mundial marcó los mejores parciales tanto el domingo como el lunes (rebajando varias veces sus propios tiempos) y este martes el finlandés Kimi Raikkonen firmó lo segundos tiempos del día, dándole continuidad al despliegue del germano.

Estos tres días apuntalan la impresión de que Ferrari ha caminado en la dirección correcta con el SF15-T en su objetivo por recortar distancias con el poderío tiránico mostrado por Mercedes en 2014. El coche, en el que la firma italiana comenzó a trabajar desde muy pronto el pasado curso, ha revolucionado su unidad de potencia de la mano de Mattia Binotto. Y esta mejora, junto a su remozada aerodinámica (un morro más largo, un alerón trasero más comedido).

Si Ferrari va a ser capaz de tutear a Mercedes, o no, es algo que está por ver, empezando por los ensayos de Barcelona. Pero las sensaciones de estos días son bien diferentes a las de 2014. Este martes, incluso, una escudería que monta motores Ferrari como Sauber estableció los mejores tiempos de la mano del brasileño Felipe Nasr, quien dio el salto del pilotaje de pruebas de Williams al volante del C34 y destacó en una jornada dominical donde acabó segundo, idéntica posición que su compañero, también debutante, el sueco Marcus Ericsson . ¿Un tapado en ciernes o un esfuerzo para cuadrar presupuesto? Sauber se marca el objetivo de los puntos tras un 2014 decepcionante y propone un coche más estable en su paso por curva y en su frenada y con un remozado frontal más ancho.

Después de un 2014 de dominio tiránico, con  dieciséis victorias de diecinueve posibles entre Lewis Hamilton y Nico Rosberg, con presencia en todos los podios del pasado mundial y triunfo aplastante en la clasificación de constructores y también en la de pilotos, los alemanes de Mercedes parten un paso por delante de todas las demás escuderías. No ya por sus avances, sino por la superioridad de su coche anterior. Una base sólida, un punto de partida avanzado.

La fiabilidad del nuevo W06 Hybrid no plantea dudas con las largas sesiones de Nico Rosberg, 157 giros el domingo y 151 este martes, o Lewis Hamilton, 91 vueltas durante el lunes. Tres jornadas de pruebas en las que los coches de la estrella han firmado los terceros mejores registros del día con el finlandés al mando y los cuartos con el británico.

El de 2015 es un Mercedes re-estilizado que no se olvida de que un porcentaje alto de su  éxito, más allá del motor, estuvo en su solvencia en cuestiones aerodinámicas. El W06 introduce modificaciones en el morro frontal, que aligera,  y en la chepa de la carrocería, de formas más suaves. Visto lo visto en Jerez, son dos coches que van a estar delante. Desde luego, dados sus títulos pasados, son los rivales a batir.

La salida de Sebastian Vettel tras un 2014 gris, su primer curso sin brillo tras cuatro años de títulos, le da todos los galones de la formación energética al australiano Daniel Ricciardo, quien ya ejerció de primer espada el año pasado y logró imponerse en Canadá, Hungría y Bélgica. Esos éxitos, los únicos más allá de Mercedes, redundan en que hay mimbres.

El monoplaza austriaco, motorizado por Renault, está dejando sensaciones contradictorias en Jerez de la Frontera. Si el domingo Ricciardo firmaba el cuarto mejor registro tras completar 35 vueltas, el lunes el ruso Daniil Kvyat rompía el alerón. Este martes, otra vez con Ricciardo como conductor, el Red Bull estableció el séptimo mejor tiempo del día en 48 vueltas. Una plaza por detrás del “toro rosso filial” de Carlos Sainz, que completó 136 vueltas al trazado gaditano.

“Hay algunos cambios que afectan al frontal del coche, pero más allá de eso los grandes cambios están bajo la carrocería”, explicaba esta semana el jefe de ingeniería Rob Marshall al respecto. La unidad de potencia, sus prestaciones y también su ubicación, ha concentrado muchos de los esfuerzos en un equipo de las bebidas energéticas en cuyo filial, Toro Rosso, debutará en la Fórmula 1 el madrileño Carlos Sainz. Sin pretensiones concretas en lo general, pero con un pulso interno con el holandés Max Verstappen.

Dos segundas plazas finales, y otros cuatro terceros puestos, firmados en su debut por el finlandés Valteri Bottas (el brasileño Felipe Massa aportó otras dos tercera plazas) alimentan las ilusiones de otra de las clásicas del circo, la británica Williams Martini. Sus anhelos acaso no pasen por ganar el título, pero sí por dar un paso adelante.

El motor Mercedes es una garantía para el FW37, un monoplaza que también concentra sus principales cambios aerodinámicos en la zona frontal.  "La idea del nuevo bólido es similar a la del FW36, que había funcionado bien. Sin embargo, siempre hay cierto margen de mejora y lo hemos utilizado para la aerodinámica de la parte delantera del monoplaza", explicaba Pat Symonds, director técnico de la escudería.

En Jerez, donde sumó 134 vueltas entre el domingo y el lunes, Bottas debutó con una quinta plaza en la primera jornada y acabó con una tercera en la segunda con casi un segundo menos. Con un tiempo ligeramente superior recogió su testigo este martes el brasileño Massa, cuarto mejor piloto del día.