La fiebre por el running es imparable. Cada vez son más los aficionados a este deporte tan aparentemente sencillo como calzarse unas zapatillas y ponerse a correr. Pero desgracias como la sucedida este domingo durante la Behobia-San Sebastián, una dura carrera popular que consta de 20 exigentes kilómetros y en la que ha fallecido una persona y diez están aún hospitalizadas (tres en la UCI), hacen plantearse si se está ejerciendo con responsabilidad.

"Era un gran deportista", aclara Ricardo Abad, un ultrafondista experto en retos imposibles (se hizo 500 maratones en 500 días) sobre el fallecido, aunque sí admite que quizás está habiendo "cierta precipitación" a la hora de elegir las pruebas en las que se compite por parte de los aficionados.

Este experto en pruebas de altísima exigencia insiste en la importancia de que los corredores se hagan "una prueba de esfuerzo. No es lo mismo hacerte un reconocimiento en reposo, donde está todo correcto, que hacerlo en esfuerzo", para conocer los límites del cuerpo de cada uno y saber los retos que se pueden acometer.

"Hoy en día puedes encontrar en Internet información sobre cómo prepararte, quizás no sea tan necesario un personal trainer, que ahora se lleva mucho, pero en cambio hacerse una prueba de esfuerzo es fundamental, a cualquiera nos puede pasar algo, esto es como que te toque la lotería, pero que no sea porque no pones todo de tu parte para evitarlo", insiste Ricardo Abad.

Luis Miguel Martín Berlanas también cree que hay precipitación a la hora de elegir las pruebas. "Todo indica que sí, que hay precipitación. Se ha perdido el respeto a lo que es correr. Todo el mundo sabe hacerlo desde niño y por eso parece que se pueda hacer de cualquier manera", indica el exatleta español.

Para Martín Berlanas es fundamental hacerse "un reconocimiento anual", y también cree importante tener un profesional que te asesore. "Los profesionales tenemos entrenadores que nos controlan, y también deberían tenerlo los aficionados. Con el auge de las carreras hay más incidentes, pero es normal, es simplemente por el volumen de aficionados que hay. Pasaría con cualquier actividad que se masificara, pasarían más cosas".

"Cuando estás en una prueba es difícil parar, es normal encontrarse mal por los nervios, haber dormido mal, etc. Llevas mucho tiempo preparándola y quieres seguir", afirma Ricardo Abad, que también contó a 20 minutos lo que le pasó al fallecido, que "ya en la salida no se encontraba demasiado bien. Pero nunca puedes imaginar que te va a pasar algo así".

"Siempre hay que guardarse algo para el día siguiente. En este tipo de pruebas con tanto ambiente como la Behoia o la San Silvestre Vallecana te dejas llevar por el ambiente festivo, y eso acaba no siendo bueno. Debes medir bien tus fuerzas, más vale llegar a meta con la sensación de que podías haber dado un poco más que desfondarse al final, que es lo que pasa muchas veces. Y además hay que tener en cuenta que la mayoría es gente que ya supera los 30 años, y llega un momento en el que hay que ser consciente de que no se tiene el mismo aguante que con 20", finaliza Martín Berlanas.