Kevin Durant y Russell Westbrook se combinaron para anotar 69 puntos y de paso conseguir que Oklahoma City Thunder endosase a Los Angeles Lakers su sexta derrota consecutiva (101-116), la peor racha de la franquicia en temporada regular en seis años. La última vez que los angelinos encajaron seis derrotas seguidas fue el 15 de febrero de 2007.

Durant, imparable, registró 42 puntos, 8 rebotes y 5 asistencias en 39 minutos, mientras que Westbrook aportó 27 tantos, 10 asistencias y 7 rebotes. Por los Lakers destacaron Kobe Bryant (28 puntos, 8/23 en tiros) y Antawn Jamison, con 19 tantos y 10 rebotes.

Los Thunder poseen una marca de 39 victorias y ninguna derrota desde la campaña 2010-11 cuando acaban el partido con un porcentaje de tiro superior al 50% (hoy, 50,6).

Earl Clark, en el segundo partido como titular de su carrera tras las magníficas actuaciones frente a Houston y, especialmente, San Antonio, respondió con creces a la confianza depositada en él por Mike D'Antoni y guió con su intensidad el enérgico arranque local, si bien los Thunder no tardaron en explotar su velocidad y elevar el nivel defensivo para obtener las primeras ventajas (14-25).

Los californianos no veían aro desde el perímetro (llegaron a registrar un 0/12 en triples) pero la aparición de Jamison y Jodie Meeks dio aire fresco a los locales, que con un parcial de 11-0 lograron empatar el choque tras los 12 primeros minutos (25-25) aprovechando el descanso de Durant y Westbrook.

El admirable rendimiento de Clark en las últimas fechas confirmó su vigencia a lo largo del choque, aunque los Thunder jugaban con una marcha más, especialmente Durant, autor de 25 puntos al descanso y un triple sobre la bocina, y Westbrook, que se hartó de romper cinturas en sus penetraciones a canasta.

Así Oklahoma avisaba con hacer trizas el choque al descanso (48-64) gracias a sus altísimos porcentajes de tiro. El chaparrón siguió en aumento en la segunda mitad y la renta alcanzó los 25 puntos de diferencia (68-93) en el tercer periodo.

Nada funcionaba en las filas de los de púrpura y oro. Nash, desconocido y sin apenas incidencia en los esquemas de ataque. Bryant, demasiado fallón. World Peace, sin puntería. Robert Sacre, incapaz en la pintura. Los Lakers eran un juguete en manos de Oklahoma, que disfrutaba al son de un imperial Durant.

Los fallos en defensa y la desidia en la actitud pusieron la cruz a los locales, que trataron de mejorar su imagen (81-97) antes de que el dúo dinámico de los Thunder pusiera el broche al choque con su explosividad. Los Lakers se quedan con un registro de 15 victorias y 21 derrotas. Y la necesidad de una reacción apremia si quieren disputar las eliminatorias por el título.

La cara de la moneda del triunfo volvió a caer del lado de los jugadores españoles, el base José Manuel Calderón, el pívot Marc Gasol y el ala-pívot congoleño nacionalizado Serge Ibaka, que además ayudaron a conseguirlos a sus respectivos equipos durante la jornada de competición de la NBA.