Los Juegos Olímpicos se llevan la palma hoy en día en cuanto a trascendencia y notoriedad, gracias al empeño inicial de Pierre de Coubertin y la modernización ochentera de Juan Antonio Samaranch, pero ni en la antigüedad ni en la actualidad son un fenómeno único. En tiempos pretéritos se organizaban otros encuentros deportivos como los Píticos, en Delfos, o los Nemeos, en Nemea. En la actualidad, donde lo olímpico está por encima de todo, pura denominación de origen, se organizan citas universitarias, panamericanas, asiáticas, de la juventud, mediterráneas, de policías y bomberos o incluso de la Commonwealth… Apenas unas pocas muestras de unas citas multideportivas que abundan y que, sí, también, aumentan.

Crecen por el alumbramiento de una cita como los Juegos Europeos, un proyecto donde se ha involucrado mucho el presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco. Los Juegos Europeos de Bakú. El dirigente gallego se rebeló contra la ausencia de una cita polideportiva en el Viejo Continente, el único que carecía de ella. Blanco y el irlandés Patrick Hickey, máximo responsable de la asociación que engloba a los Comités Olímpicos Europeos (EOC), han sido los principales valedores de una cita que se estrenará entre este viernes 12 y el próximo domingo 28 de junio en Bakú, la capital de Azerbaiyán. Una ubicación mucho más cercana a Teherán que a Berlín.

Una cita no falta de polémica por los detractores, por la elección de su programa, por la cuestión de las fechas y otros acontecimientos deportivos o por los problemas para convocar a las grandes figuras de sus respectivas disciplinas. Incluso por el modo de elegir la sede, sin concurso público entre candidaturas, más bien negociación privada entre las partes, o por las críticas de varios eurodiputados a que la celebración tenga lugar en un país con una veintena de presos políticos. Y con el inconveniente adicional de conocer, dos días antes de su estreno, que Holanda renuncia a organizar una segunda edición prevista para 2019. Pero desde el 1 de octubre de 2012, cuando se aprobó el proyecto definitivo, Bakú 2015 se convirtió en una inminente realidad.

Los primeros Juegos Europeos de la historia nacen con un programa de 19 deportes (253 medallas en juego y hasta 12 ofreciendo clasificaciones para Río 2016) que mezcla modalidades muy olímpicas, como el judo, la natación  o el ciclismo, con otras novedosas, como el karate, el fútbol playa o el formato de baloncesto 3x3. Para la delegación española, con dos meses de margen sobre sus Mundiales, el atletismo, el considerado el deporte rey de los Juegos, no aparece en el programa oficial de unos Europeos donde participarán 6.200 atletas de 50 países (España acude con 214 deportistas, 117 hombres y 97 mujeres) competirán y que, como otras citas, ha requerido nuevas estructuras. Solo el nuevo Estadio Nacional de Bakú, en torno al que pivota el espíritu de la cita, ha costado unos 500 millones de euros.

Los deportes de Bakú 2015, por orden alfabético, son: atletismo, bádminton, baloncesto 3x3, ciclismo (mountain bike, BMX, carretera), esgrima, fútbol playa, gimnasia (artística, rítmica, aeróbic, trampolín) judo, judo adaptado, karate (kata y kumite), lucha (grecorromana, olímpica), sambo, natación (natación, saltos, sincronizada, waterpolo), piragüismo (aguas tranquilas), taekwondo, tenis de mesa, tiro con arco, tiro olímpico (plato, precisión), triatlón y voley playa. El programa de la competición completo, aquí.