Para Rafa Benítez, entrenador del Liverool, lo más importante es el fútbol, pero para otros hay cosas que merecen más la pena: por ejemplo, ser padre. Eso es lo que piensa Xabi Alonso, que el pasado lunes pidió un día libre a Benítez ante el inminente nacimiento de su hijo. Se ofreció a viajar a Italia para jugar el partido contra el Inter unas horas después que el equipo, pero Benítez lo descartó.

Benítez se lo denegó y el jugador se negó a viajar a Milán. El técnico no ha dudado en apartarlo del equipo y en Inglaterra ha habido mucha polémica. La mayor parte de los medios han dado mucha cobertura al enfrentamiento entre el jugador y el entrenador.

La Asociación Profesional de Futbolistas ingleses apoyó ayer la decisión de Xabi Alonso de no viajar a Italia. El subdirector del sindicato de los jugadores británicos, Mick McGuire, recordó ayer en la prensa inglesa que "un momento así, el nacimiento de un hijo, es más importante que cualquier empleo. Sabemos que se trata de un partido importante , pero ¿hay algo más importante que el motivo por el que se ha quedado?"

Relación deteriorada

Tanta es la tensión entre los dos que la prensa inglesa da por hecha la salida de Xabi Alonso del Liverpool si Benítez sigue en el banquillo de Anfield. Este episodio es el colofón de una relación que con el tiempo se ha ido deteriorando.

Pero Benítez también puede abandonar Anfield. El técnico español lanzó un anzuelo a los clubes de la Serie A italiana al indicar que "me iría encantado al fútbol italiano, hay tres equipos con los que siempre hay que contar el Inter, el Milan y la Juve". Ayer corrían rumores en Liverpool que apuntaban a que el próximo club de Benitez, este mismo verano, pudiera ser el Milan.