El holandés absuelto por violación no perdona

Romano salió el jueves de la cárcel de Palma con declaraciones en las que aseguraba que no va a perdonar lo que le han hecho durante este tiempo por una condena errónea. Ha comparecido ante los medios de comunicación este domingo en una iglesia de Palma donde el párroco le dio cobijo ya que no tenía donde ir. Romano trabajaba de camarero en Málaga hace 12 años cuando fue encarcelado por tres violaciones. Una prueba de ADN le exculpa de una de ellas. Ha decidido quedarse en España hasta que la justicia le reconozca su inocencia total.