La saturación en los cementerios de Bolivia obliga a los familiares de los fallecidos a cavar sus propias tumbas

La situación de los cementerios en Bolivia es dramática. Ante el aumento de muertes a causa de la pandemia de COVID-19, muchos camposantos se han quedado sin espacio. Este problema ha obligado a los familiares de los fallecidos a cavar sus propias tumbas tras colarse ilegalmente. La demanda de entierros en La Paz ha subido un 580%. El país, con una de las tasas de pobreza más altas de Latinoamérica, tiene muchos problemas para hacer frente a la pandemia, con una situación política muy tensa y unas elecciones generales a la vuelta de la esquina.