El programa Callejeros regresó a Cuatro tras años de ausencia y volvió a hacer lo que mejor sabe: recoger el día a día más peculiar, las pequeñas historias, las miseras domésticas que a veces, con un poco de humor, se convierten en iconos virales de la televisión. 

Fue el reportero y director del espacio, Nacho Medina, el que siguió la investigación de un grupo de vecinos de un portal de Badalona en cuyo ascensor aparecieron unas heces humanas. 

"Es una señora mierda, pero con mayúsculas grandes", decía el mensaje de voz enviado al grupo de Whatsapp de los vecinos para informar de la tropelía. Sobre la pista se pusieron Aitana y Merche, el "equipo de CSI del edificio", tal como les definió Medina.

"Antes de limpiar ya le estaban haciendo fotos, es como un reportaje del !Hola¡", decía Aitana sobre la cantidad de imágenes de la deposición que corrían por el grupo vecinal, que llegó a una clara conclusión: es humana. 

"Al dueño le diría que le envidio el esfínter, es cuadrada", o "iría puesto de agua mágica y sus sustancias", eran las conclusiones de las dos aficionadas a la investigación. 

Cristóbal, en 'First Dates': "Me apuntaron mis amigos, pensé que era de coña, pero cuando me di cuenta ya estaba en el restaurante"

Medina comenzó a recorrer los alrededores y a llamar puerta a puerta a los vecinos, preguntando si reconocían ese detrito. "Todavía no sabemos quién se ha cagado, pero lo sabremos...", decía un vecino mayor, que daba con la clave: "Hay que coger un cachito de caquita y analizarlo y así se sabe quién se ha cagado".

A pesar de las pesquisas, finalmente y hasta la fecha, el autor de los hechos se ha salido con la suya y sigue estando en el anonimato. Nacho Medina apenas consiguió la confesión de un vecino que a veces se "ventosea" en el ascensor. Eso dio la vida a las redes sociales, que se volcaron con el asunto: 

Ducha con paraguas

Zulema es una mujer que denunciaba que las humedades del piso de su vecina de arriba ha provocado que se le caiga el techo y entrara agua "como una piscina". La situación es dramática, pues sus vecinos "limpian tirando cubos de agua o con una manguera", lo que hace que el suelo, el techo de Zulema, esté completamente podrido. 

Eso la obliga, por ejemplo, a ducharse con un paragüas encima, porque sobre su ducha está el bidet de los vecinos "y ellos cuando van al baño se lavan, no usan papel" y esas aguas caen sobre el piso de abajo.

Los vecinos de arriba no han entrado en razones y como consecuencia en su casa hay hongos, humedades, techos hundidos...