El hermano de Gianmarco Onestini, Luca, ha pasado unos días en Honduras para visitar a su familiar en uno de los encuentros que paulatinamente van teniendo los concursantes de Supervivientes con sus seres queridos. 

Allí, el italiano se ha convertido en toda una estrella entre los concursantes, gracias a sus dotes para encender fuego y para la pesca. 

Pero de regreso en Madrid el joven contó en el plató de Supervivientes, durante Conexión Honduras, que tanto su hermano como los demás concursantes no huelen a flores, precisamente. 

Meses ya en la isla, lavándose solo con agua de mar y a la intemperie ha relajado mucho sus costumbres higiénicas y sus modales. 

Le preguntaron al italiano por su experiencia olfativa, a lo que respondió: "Nunca había sentido algo así, malísimo".

"Me parecía estar en medio de una tribu. Todo comer con las manos, con las... Huelen de todo. Un poco de barro, de comida que está allí, de fuego, de vómito... No se pueden lavar", explicó el joven, haciendo muecas de contrariedad. 

Más tolerante fue Paz Guerra, la madre de Alejandro Albalá, que también estuvo de visita en la isla y que dijo que huelen "a humo y a mar".