Pese a que todo parecía ir viento en popa en la formalización del divorcio de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, ahora parece ser que las cosas no marchan tan bien como parecía.
El (todavía) matrimonio habría asegurado estar esperando a que Irene, su hija menor, cumpliera la mayoría de edad para no tener que incluir en el acuerdo de divorcio temas relativos a la custodia de la joven. Sin embargo, este miércoles, Paloma García-Pelayo ha destacado que han surgido discrepancias en el último momento.
La fecha escogida, por tanto, para hacer efectiva la separación había sido el próximo cinco de junio. Tal como ha explicado la periodista: "Tienen que ir personalmente, firmar con asistencia de abogado y me dicen, como novedad, que puede ser en Ginebra, donde está el último domicilio del matrimonio".
"Este acuerdo pasa por firmar un convenio de regulación del que falta la firma por cuestiones económicas. El problema económico vendría de que Iñaki, al parecer, tiene que recibir una compensación por parte de la infanta Cristina. Ella no está dispuesta a financiar la vida de él estando con otra mujer", ha agregado Paloma García-Pelayo.
Ana Rosa Quintana, por su parte, ha destacado: "¿Pero los hijos no son mayores de edad?", a lo que la periodista ha apuntado: "El problema es que no son independientes económicamente y la Ley de divorcio dice que hay que dar una compensación a la parte del matrimonio que sale peor parada".
"Ella no quiere fastidiarle, pero tampoco quiere financiar con una cantidad inoportuna. Los hijos están con su madre a todas, pero adoran a Iñaki", ha concluido Paloma García-Pelayo.
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