Este miércoles 8 de diciembre, Telecinco emitió una nueva entrega de La isla de las tentaciones. En el capítulo quedó claro que, pese a que Simone fue el último en incorporarse a la convivencia en Villa Paraíso, lo hizo pisando fuerte. En cuanto llegó, el italiano consiguió una cita con Zoe, pero no es la única a la que le llamó la atención.

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"Simone nos pone a todas", dijo Rosario al empezar la última entrega. Y según parece, el comentario no fue una exageración en absoluto. Pese a haber besado en varias ocasiones a Suso, siéndole infiel a su novio Álvaro, y a haber dicho que lo suyo con el canario era algo muy especial, esto podría tambalearse.

El nuevo objetivo de Rosario es Simone, al que besó en el cuello durante un juego y le dijo que sentía una gran atracción sexual por él aunque, al verle por la televisión en La isla de las tentaciones 3, no le gustaba. La pareja bailó sensualmente y llegó a quedarse a solas en la piscina cuando todos se habían ido a dormir, algo que vio Suso y que no celebró precisamente.

Según contó Rosario, el canario se bebió un vaso de agua en la cocina, se les quedó mirando y dio un golpe, visiblemente disgustado. Esto no le gustó nada a la todavía novia de Álvaro, que le dejó claro a Suso que estaba dispuesta a verse tentada por varias personas y que él no era su pareja. 

Pero hay una tercerca chica abiertamente interesada en Simone: Tania. Esta también tonteó con el italiano y, a la hora de elegir las citas y tras saber que Stiven era el vetado de los chicos, reconoció que tenía en mente pedirle una cita a Simone, aunque Rosario fue más rápida y será quien disfrute un rato de él a solas. Por su parte, Tania recurrió a Suso, con quien consideró que se lo pasaría muy bien.