La Asociación Ginecología Obstetricia Aragón ha alertado de la necesidad de prevenir el cáncer de cérvix, también denominado de cuello de útero, la segunda causa de muerte por cáncer en mujeres jóvenes.

Esta enfermedad llega derivada en un 90 por ciento de los casos por el Papiloma Humano, "un virus que infecta a la mayoría de las aragonesas alguna vez en su vida, aunque pocas son conscientes de ello".

La Asociación Ginecología Obstetricia Aragón ha explicado en un comunicado que el virus del Papiloma Humano "pasa en muchas ocasiones desapercibido, pero no por ello hay que olvidar sus consecuencias" y ha remarcado la necesidad de prevenirlo ahora que existe tratamiento.

El virus del Papiloma Humano es una enfermedad de transmisión sexual. "La mayoría de los afectados no presenta síntomas y su sistema inmunológico lo hace desaparecer sin que cause ningún daño" por lo que "no hay percepción de riesgo y ése es el riesgo", ha indicado el presidente de la Asociación de Ginecología y Obstetricia de Aragón, Antonio Miñano.

Sin embargo, en Aragón, el 40 por ciento de las mujeres que sufre este tumor canceroso muere, además de que "los estudios sugieren también que este virus desempeña un papel destacado en los cánceres de ano, pene, vulva o vagina", ha comentado el especialista del Hospital San Jorge de Huesca y miembro de la Asociación Española de Patología Cervical y Colposcopia, José Manuel Ramón y Cajal.

Los ginecólogos aragoneses ha recordado que hay una vacuna comercializada en farmacias para prevenir el virus y su principal derivado, el cáncer de cérvix, ya que las estadísticas reflejan que las mujeres que se vacunan "reducen en un 70 por ciento las posibilidades de padecer un cáncer de cuello de útero y en un 90 por ciento las verrugas anogenitales", ha dicho Ramón y Cajal.

La Asociación Ginecología Obstetricia Aragón ha agregado que la vacuna provoca únicamente, y en algunas pacientes, problemas menores como fiebre puntual o pequeñas irritaciones localizadas y es el único tratamiento preventivo conocido, puesto que el uso del preservativo no excluye de la transmisión.