El presidente egipcio, Hosni Mubarak, ha anunciado en un discurso televisado que no se presentará a las próximas elecciones presidenciales, programadas para septiembre de 2011.

Durante su mensaje, Mubarak ha asegurado que las protestas han sido "manipuladas por fuerzas políticas". También ha asegurado que no abandonará el país y que "morirá en suelo egipcio".

El mensaje se ha producido después de una de las jornadas de protesta más duras desde que empezó la crisis. Decenas de miles de personas (algunas fuentes cifran en un millón de asistentes) se han concentrado en el centro de El Cairo para pedir la renuncia del presidente, en el poder desde 1981.

"Os digo con toda sinceridad que, a pesar de las actuales circunstancias, no tenía intención de participar en las próximas elecciones", ha afirmado Mubarak en el mensaje. "He agotado mi vida sirviendo a Egipto y su pueblo".

También ha dicho que pedirá al Parlamente que cambie la legislación que fija las condiciones para poderse presentar como candidato presidencial.

El actual esquema, por ejemplo, impide que pueda aspirar a la Presidencia el premio nobel de la paz Mohamed el Baradei.

También señaló que pedirá al Parlamento que dé curso a las impugnaciones presentadas por los resultados de las últimas elecciones legislativas, en noviembre y diciembre pasado, que se desarrollaron con múltiples denuncias de fraude.