Un hombre de 28 años de edad, identificado por las iniciales O.G.R., ha sido condenado a 15 meses de prisión por un delito de allanamiento de morada por entrar en la casa de su vecina en estado de embriaguez.

Se da la circunstancia que, en mayo de 2008, este hombre ya fue condenado a la misma pena por otro delito continuado de allanamiento, aunque no entró en prisión con la condición de no volver a delinquir en dos años.

Según la sentencia de conformidad de la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Ciudad Real, a la que ha tenido acceso Europa Press, sobre las 06.30 horas del 9 de mayo de 2009, el hombre, en estado de embriaguez, saltó desde su terraza a la de su vecina y abrió la puerta corredera de cristal que daba al salón.

A continuación, encendió la luz y se dirigió a la habitación de la mujer, que se despertó al verle y comenzó a gritar, por lo que el hombre, que no pudo abrir la puerta de la entrada principal de la casa, volvió a saltar hacía su terraza, siendo detenido sobre las 18.00 de ese día, después de que la Policía comprobó las huellas dactilares.

En la sentencia se ha tenido en cuenta la agravante de reiteración en el delito y la atenuante de estado de embriaguez.