La Policía británica ayudó a sustentar evidencias en contra de los padres de Madeleine McCann, desaparecida en 2007 en una población costera del Algarve portugués, cuando estaban siendo investigados como sospechosos por la Policía portuguesa. Así se desprende de uno de los cables de WikiLeaks publicado por el diario británico The Guardian.

En el cable, fechado en Lisboa el 29 de septiembre de 2007, el entonces embajador de Estados Unidos en Portugal, Alfred Hoffman, asegura que su homólogo británico, Alexander W. Ellis, "admitió que la policía británica desarrolló las pruebas en contra de los McCann" para la Policía de Portugal y le aseguró "que las autoridades de ambos países estaban trabajando de forma coordinada" en el caso.

Ellis también le dijo a su par estadounidense "que la gran atención mediática levantada era esperable y aceptable, siempre que los representantes del gobierno mantuvieran sus comentarios a puerta cerrada".

La policía portuguesa consideró a Kate y Gerry McCann sospechosos de la desaparición de su hija Madeleine hasta en que en julio de 2008 se puso fin a la investigación del caso sin que nadie fuera llevado ante la justicia.