Cuatro autobuses de Bilbobus, que cubre el servicio urbano de la capital vizcaína, han sufrido daños materiales este martes, coincidiendo con la segunda jornada de huelga de los trabajadores. El comité de huelga se ha desvincualdo de los ataques y ha acusado a la empresa de cometer una "cacicada más" y rayar "la dictadura" al impedir su acceso a la empresa.

En declaraciones a Europa Press, un portavoz de Veolia, empresa concesionaria del servicio, ha asegurado que, alrededor de las siete de la mañana, cuando se producía su salida de las cocheras, ubicadas en Zorrozabaso, varios vehículos han recibido el impacto de huevos, así como de una mezcla de agua y pegamento, tanto en el exterior como en el interior.

Por su parte, la Ertzaintza ha manifestado que otros tres autobuses han resultado dañados sobre las ocho de la mañana. Los tres presentaban pinchadas una de sus ruedas y dos han registrado la fractura de una de sus lunas.

Fuentes del comité de huelga se han desvinculado de los ataques, en declaraciones a Europa Press, y por contra, han denunciado que, a las cuatro y media de la mañana, hora prevista para iniciar el los servicios, "las puertas de las cocheras se encontraban cerradas a cal y canto" y se ha impedido su acceso a las dependencias. "Eso sí es grave, porque si un empleado quería hacer uso de su derecho legítimo a trabajar, no ha podido hacerlo. Es una cacicada más", ha denunciado.

Además, ha recordado que la importante presencia de la Ertzintza ante las cocheras a primera hora de la madrugada, que ha podido constatar "que no se ha tocado ni un autonús". "Hemos estado en la acer, sin dar ni una sola voz. Que no nos acusen de los ataques. Lo que tiene que hacer es sentarse a negociar", ha advertido.

HUELGA

Según Veolia, los servicios mínimos establecidos, un 30 por ciento, se han cumplido con normalidad, y los 40 autobuses previstos para cubrirlos desarrollan los distintos trayectos.

El comité de empresa ha confirmado este extremo ya ha informado de que el seguimiento de la huelga, por parte de los conductores, ha sido "del cien por cien".

Los trabajadores se han manifestado por la Gran Vía de Bilbao, tras salir de las cocheras a las ocho y media de la mañana. Durante la marcha, han advertido que no cederán en sus reivindicaciones y cumplirán el calendarios de movilizaciones hasta que Veolia "no se siente a negociar y lleguemos a un acuerdo".

La plantilla de Bilbobus reclama a la empresa el cumplimiento de determinados acuerdos en materia de subrogación de personal, calendario laboral y condiciones de trabajo, así como la conversión de determinados contratos en indefinidos.