Cuando se conoció a la mascota de la Expo de Zaragoza 2008, se abrió una campaña para pedir a los zaragozanos que le pusieran nombre a través de mensajes de móvil.

En la primera fase, la ciudadanía andaba mosqueada y 20 minutos confirmó que los responsables de la Expo no respetaron la primera votación sobre el nombre de la mascota. Chisla, el nombre que fue enviado en más SMS, no fue seleccionado, mientras otros, como el propio Fluvi, pasaron a la fase final sin haber recibido apenas apoyos.

Para colmo, en el último tramo de la selección Fluvi remontó una gran diferencia de votos con Gotika en pocos días y los responsables de la Expo se apresuraron a decir que Fluvi era un nombre mucho más adecuado para la promoción.

Uno de los zaragozanos que se sienten "estafados" en la selección del nombre de la mascota ha abierto una web en la que recoge firmas para quejarse de la "imposición" del nombre de Fluvi a la imagen de la Expo 2008.

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