Casi 70 días de encierro a 700 metros de profundidad. La historia con final feliz de los 33 mineros de Chile tiene desde este miércoles 13 de octubre, día en el que todos fueron rescatados, una segunda parte que, incluso, podría ser peor que la primera. Sobrevivieron bajo tierra, ahora lo tendrán que hacer en la superficie con todo el 'circo' mediático y económico que se ha generado alrededor de ellos, antes personas anónimas, que a partir de ahora protagonizarán exclusivas, libros, películas y hasta videojuegos.

"Paradójicamente, el problema casi lo van a tener más fuera que dentro", dice Francisco Díaz Bretones, doctor en Psicología y vicedecano de la Facultad de Ciencias del Trabajo de la Universidad de Granada. Según el profesor, "la relevancia mediática puede llevar a una situación 'destello', ya que tras un inicial protagonismo, tendrán un inevitable olvido".

Díaz Bretones destaca que los mineros han mantenido una "gran unidad y cohesión de grupo" y deben mantenerse así. "Se han organizado muy bien, parece que tienen un acuerdo entre ellos por el cual cada uno hablará de su propia experiencia y no la de los demás. El peligro podría estar si se rompe ese pacto", afirma. Por último, el psicólogo recomienda que estos hombres no pierdan su identidad y que, "aunque ahora ganen mucho dinero, no pierdan su condición de mineros".

Sin embargo, eso será difícil para los "33 de Atacama", algunos incluso han dicho que no volverán a pisar una mina, por toda la expectación que están generando. Millones de personas siguieron en todo el mundo el rescate en directo, lo que demuestra que es una historia que 'vende', y ya se está hablando, por ejemplo, de cifras millonarias para que concedan entrevistas. Hay hasta pujas, como si de una subasta se tratara. El País ha informado que el diario alemán Bild envió a uno de los mineros un contrato con el que se comprometía a pagarle 32.000 euros a cambio de sus declaraciones. El minero lo firmó bajo tierra.

También Erbol informó de que el minero boliviano Carlos Mamani ha recibido diversas ofertas para dar una exclusiva. Su suegro desveló que la "tarifa básica" que se está manejando es de 25.000 euros y que otros componentes del grupo ya tienen diversos acuerdos. De hecho, viendo el interés mundial de su historia, los trabajadores prohibieron a sus familiares que firmaran cualquier exclusiva hasta que ellos no salieran de la mina.

Películas, entradas de fútbol, viajes...

Pero los mineros cuentan con más opciones de ingresos. Las editoriales se 'pelean' por los derechos del libro que escribirá el minero Víctor Segovia, que durante su encierro ya ha ido plasmando su experiencia sobre el papel. También están rodándose un documental con imágenes y entrevistas exclusivas que emitirá Discovery Channel y una película para televisión basada en la historia de los mineros que estrenará en los próximos meses Antena 3.

Y hay más. Cada trabajador ha recibido de regalo un cheque de 8.000 euros por parte del empresario minero de Chile Leonardo Farkas, han sido invitados por varios países como Taiwán o Grecia para vivir unas idílicas vacaciones y han recibido de Apple varios ejemplares de la última versión del iPod. Algunos también cuentan con entradas de fútbol de por vida, regalo del club Universidad de Chile, mientras que el minero Franklin Lobos, también ex futbolista profesional, podría recorrer el mundo ofreciendo charlas de motivación por cuenta de la FIFA. El Manchester United y el Real Madrid también les ha invitado para ver un partido.

No faltará tampoco un 'reality', el cual se estrenará en abril de 2011. Se llamará Coal y contará las vidas de los mineros que trabajan en un yacimiento de carbón en West Virginia (EE UU). Está claro que la influencia del 'heroico' rescate de los mineros chilenos ha tenido mucho que ver en este proyecto. Por último, habrá un videojuego creado por una empresa chilena e inspirado en la historia de sus compatriotas.

"Esto es una locura", ha dicho el minero Edison Peña tras escapar de las decenas de micrófonos que le perseguían tras salir del hospital. Lo que antes eran días de oscuridad dentro de la mina, ahora están llenos de luz por los focos de la televisión. El problema será cómo pasar de una situación a otra. "No nos no traten como artistas", pidió el minero Mario Sepúlveda. Sin embargo, ¿ha comenzado ya el 'show'?