La sección sindical de la Confederación General de Trabajadores (CGT) en Caja Mediterráneo (CAM) aseguró hoy en un comunicado que la dirección de la entidad financiera se ha comprometido a sentarse con los sindicatos en la primera quincena de julio.

Asimismo, según el sindicato, la dirección de CAM les comunicó por escrito el pasado 18 de junio que el SIP o 'fusión fría' de la entidad con Cajastur, Caja Extremadura y Caja Cantabria "anticipa una racionalización de la administración y gerencia de las entidades involucradas".

Dicho Plan de Integración supondrá también "mejoras en la eficiencia y estructura de costes, cuyas eventuales consecuencias laborales se encuentran pendientes de concreción a fecha de hoy, teniendo esta entidad el propósito de limitar en la medida de lo posible su alcance y efecto", según señala el escrito, de acuerdo con la información del comunicado.

CGT-CAM explicó que la dirección señala que el SIP es "un instrumento facilitador de los procesos de integración entre cajas". Además, la entidad financiera añade que los respectivos consejos de administración participantes en la 'fusión fría' "han solicitado del Banco de España la aprobación de su Plan de Integración, así como el apoyo del FROB a fin de reforzar los recursos propios del nuevo grupo mediante la suscripción de participaciones preferentes".

En el comunicado, CGT-CAM solicita el mantenimiento del pleno empleo y acuerdo laboral ya, así como que se garantice que todo el personal seguirá trabajando en la entidad, por lo que se mostró contrario al cambio de marca en oficinas y a la externalización de los servicios centrales e informática.

Además, la organización sindical exigió que el SIP sea gestionado por una agrupación de cajas. "No queremos ser un banco. No a la privatización de las cajas", opinó. El sindicato reclamó también la solución de las problemáticas laborales de CAM, es decir, "la equiparación de las mejores condiciones laborales para todo el personal de las cajas afectadas".

Por último, CGT-CAM instó a la unidad sindical para hacer un frente unitario a las problemáticas laborales antes de que el futuro de los trabajadores de la entidad financiera esté decidido.