El concejal responsable del área de Servicios Municipales del Consistorio oscense, Germán Sanromán, manifestó hoy espera que el Ayuntamiento y la empresa acerquen posturas y se pueda adjudicar el servicio a finales de este mes.

Sanromán explicó que el servicio de transporte urbano es "deficitario" y es el ayuntamiento el que debe asumir el déficit, que resulta de la diferencia entre los ingresos por venta de billetes y los gastos de la empresa. Para afrontar ese déficit, el Consistorio oscense dispone de una cantidad límite de 278.000 euros.

Según el concejal, la oferta de Huesca Automóvil no se ajustaba al pliego de condiciones, puesto que "no aclaraba el capítulo de ingresos" y preveía usuarios que el transporte público no tendrá, por lo que ese déficit "se presupone superior". Esta, dijo, es la razón por la que, después de un año, se ha declarado desierto este concurso.

A pesar de ello, el Ayuntamiento de Huesca va a intentar acercar posturas con Huesca Automóvil para que acepte el pliego y se ajuste al límite de 278.000 euros. Germán Sanromán dijo que "intentaremos poder entendernos con la empresa y cerrar un contrato lo más rápido posible. Nos hemos fijado un plazo de diez días, porque tal y como están las cosas hay o no hay acuerdo y si no lo hay será porque la empresa querrá más dinero, pero nosotros tenemos un límite de déficit de 278.000 euros". El concejal añadió que "si la empresa justifica que el déficit es de 278.000 euros, mañana podemos firmar".

Si el ayuntamiento y la empresa llegan a esperado, Huesca Automóvil tendrá un plazo de nueve meses para poner en marcha el servicio de transporte urbano de la ciudad.