La investigación, llevada a cabo por un equipo de expertos de la Carnegie Institution, en Baltimore (Maryland), ha descubierto los mismos mecanismos de células madre en funcionamiento tanto en el sistema digestivo del hombre como en el tracto intestinal de este tipo de moscas.

"El hecho de que las moscas de la fruta tengan el mismo programa genético en sus intestinos que los humanos nos indica que ambos fuimos cortados por el mismo patrón evolutivo hace ya más de 500 millones de años", apuntó el doctor Benjamin Ohistein, del equipo de investigadores.

Las células madre están programadas para convertirse en distintos tipos de tejidos dentro del cuerpo humano. En el sistema intestinal, las células implicadas en el proceso digestivo son constantemente renovadas por las células madre.

Para llegar a estos resultados, el grupo de expertos se centró en el funcionamiento de un intestino de tamaño pequeño, donde los alimentos se dividen en los diferentes nutrientes para que estos sean absorbidos por el cuerpo.

Los científicos se fijaron en dos tipos de células: las que ayudan a dividir la comida y a transportar las moléculas del alimento, y en las que producen las hormonas peptídicas. Al igual que ocurre con los humanos, las células que funcionan en los aparatos digestivos de estos insectos son rellenadas por el grupo de células madre.

Otro punto en común con los humanos y otros vertebrados es que las células madre son capaces de convertirse en una variedad diferente de células.

Con esta investigación, se pretende llegar a un mejor entendimiento de los desarreglos que experimenta el sistema intestinal humano, incluyendo algunos tipos de cáncer.

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