El acto, programado en la LXIII edición de la feria vallisoletana, reunió a estos tres poetas, quienes dialogaron sobre 'La voz y la palabra' y confesaron el gusto que encuentran en "jugar" con el lenguaje. De hecho, como reflexionó Beltrán, los rapsodas de jóvenes son "muy serios" y cuando ya alcanzan cierta edad se vuelven "como niños grandes".

En una sesión llena de humor, chistes más o menos fáciles y bromas, Aute incidió en que existen palabras "mágicas, escurridizas y llenas de significados" por lo que se confesó como un "adicto" a ellas y reconoció que cada vez le cuesta más leer porque se detiene en cada palabra para buscarle otros significados o indagar en su origen. A este respecto, consideró que "no vienen de ningún sitio", sino que se trata de fonemas que el tiempo "ha ido uniendo y dando forma".

Sobre el asunto del significado Fernando Beltrán defendió que en la actualidad "se juega poco con las palabras, se estiran poco y se profundiza poco en ellas", por lo que ensalzó la labor de los poetas para añadir acepciones y situaciones a cada término.

No obstante, Luis Eduardo Aute advirtió de que "no todas las palabras admiten juegos", aunque consideró posteriormente que incluso el vocablo 'tabú' es "encantador" porque proviene de las lenguas de oceanía y no tiene una traducción literal en el castellano o en otro idioma.

Por su parte, Ángel Petismel explicó que en su obra ha comprobado cómo "en cada poema surgen cuatro o cinco palabras que están siempre acechando", pero que, en definitiva "las más sencillas son las más luminosas" Además, apuntó que actualmente su palabra favorita es "alba", porque ahora le recuerda a otras cosas "a parte de a Aute", ya que tiene una hija con ese nombre.

En cuanto a Fernando Beltrán, habló sobre su faceta como "nombrador" en su empresa 'El nombre de las cosas' que ha dado denominación a proyectos comerciales como 'Amena', 'Opencor', 'Aliada', 'Digrato' o el hotel vallisoletano 'Gareus'. El poeta ovetense incidió en que aún quedan "palabras por inventar", como por ejemplo el primer escalón de una escalera, que, a su juicio, debería tener nombre.

Así, recordó una cita de Gabriel García Márquez, quien escribió que "El mundo era tan reciente que muchas cosas carecían de nombre". También incidió en que este término aparece en las primeras líneas de muchas novelas.

Los autores también firmaron sus publicaciones como el poemario 'Cinta transportadora', de Petismel, con el que obtuvo en 2009 el Premio Internacional de Poesía Claudio Rodríguez; o los 'librobichos' de Aute, como 'Animaluno' o 'Animalhito', cuya quinta entrega será 'No hay quinto AnimaLo'.

Petismel también habló de sus nuevos proyectos, como la reedición de 'El océano de los escritores' que ya publicó en 1989 y 'Under wood songs', un disco con canciones antiguas inéditas que supone una "vuelta al comienzo" de su etapa en Madrid durante la 'movida', cuando vivía en el barrio de Malasaña. De hecho, en la actualidad vuelve a residir en esta zona.