Los hechos tuvieron lugar el 3 de junio de 2008, por la tarde. Según las diligencias fiscales a las que ha tenido acceso Europa Press, el hombre, de 43 años, se dirigió al exterior del citado colegio ataviado con una falda y "con ánimo libidinoso la levantaba efectuando exhibición obscena de sus genitales ante los niños, llegando a masturbarse en su presencia". Algunas madres le recriminaron su conducta, a lo que hizo caso omiso y no abandonó el lugar hasta que se personó una patrulla policial.

Según consta en la documentación del fiscal, el acusado fue declarado "incapaz" por una sentencia judicial en 2007. Tras los hechos ocurridos en el colegio avilesino fue examinado por un médico forense que dictaminó que sufre "sordomudez y retraso mental", lo que "le impide tener contacto con la realidad, sin que, por tanto, se encuentre en condiciones de discernir el bien del mal y de conocer las consecuencias reales de sus actos".