El ministro de Interior iraquí niega ahora las acusaciones de torturas en sus locales

Dos días después de que el primer ministro iraquí asegurara que 173 presos habían sido torturados en una prisión dependiente del Ministerio de Interior, el propio ministro del Interior, Bayan Yabr, ha negado esta información que califica como "una gran injusticia".
Unos presos son atendidos en un hospital en Bagdad de unas heridas causadas, presuntamente, por torturas
Unos presos son atendidos en un hospital en Bagdad de unas heridas causadas, presuntamente, por torturas
AP
Unos presos son atendidos en un hospital en Bagdad de unas heridas causadas, presuntamente, por torturas
Las informaciones divulgadas sobre la existencia de agresiones no son verdad y son de una gran injusticia para el Ministerio de Interior

"Las informaciones divulgadas sobre la existencia de agresiones no son verdad y son de una gran injusticia para el Ministerio de Interior", afirmó este jueves Yabr en una rueda de prensa en la capital.

El primer ministro iraquí, Ibrahim Al Yafari, admitió el martes que se habían cometido torturas en una prisión dependiente del Ministerio de Interior, donde 173 detenidos fueron vejados y golpeados.

Descubiertos por soldados estadounidenses

Las fuerzas estadounidenses irrumpieron el pasado domingo en una instalación perteneciente al Ministerio, aunque no se informó de si es en ese edificio donde se encontraban los presos presuntamente torturados.

Aunque en un principio el ejército estadounidense no dio detalles sobre el asalto a la sede ministerial, el mismo día en que Yafari reconoció la existencia de torturas, el mando militar afirmó que sus soldados penetraron en el edificio para liberar a los presos que las sufrían.

Entre los encarcelados se encontraron dos reclusos que sufren de parálisis y otros que tienen distintas marcas en el cuerpo causadas, presuntamente, por la tortura.

"El cuartel es uno de los edificios del ministerio, que se usaba como su sede y en el que estaba el despacho del ex ministro de Interior. No es un lugar secreto como se ha dicho", insistió el ministro iraquí.

Yabr añadió que "dentro de esta sede hay 29 jueces de las fuerzas especiales del ministerio de Interior, en su mayoría baazistas (del antiguo partido Baaz del depuesto dictador Sadam Husein), que no han sido apartados (de sus funciones) y que vigilan todo lo que pasa".

El responsable de Interior aseguró que su ministerio no permite a ningún general que golpeé a un preso, aunque reconoció que existen siete casos de agresiones a los presos de la citada sede, y que se interrogará y juzgará a los agresores.

Además, Yabr acusó al Partido Islámico Iraquí (PII), la mayor agrupación suní en Irak, "de dirigirse a los estadounidenses en vez de al ministerio, en un intento de presionarnos".

NOTICIAS RELACIONADAS:

Mostrar comentarios

Códigos Descuento