Así, el consorcio creado en 2004 por iniciativa de la Diputación para gestionar el mantenimiento de las instalaciones de agua, saneamiento y depuración de los municipios menores de 20.000 habitantes, agrupa ya a 38 ayuntamientos de la provincia con una población global de 90.000 personas.

"Las actuales políticas europeas promueven la privatización de los servicios del ciclo integral de agua con la liberalización", explicó a Europa Press el diputado provincial de Sostenibilidad y presidente del Consorcio Provincial del Agua, Miguel Esteban Martín, quien continuó que "van a seguir desarrollando un modelo de gestión no sostenible donde el beneficio va a tener un papel preponderante".

De esta forma, "se hace necesario un nuevo modelo, más eficiente y responsable, donde se dé importancia a la participación en la gestión democrática, transparente y eficaz de los sistemas públicos de agua". Matizó que "el agua no es un recurso económico, tiene una función social y ambiental, que perdemos cuando la degradamos o la sobreexplotamos".

Frente a estas tesis de la Unión Europea (UE), que explicó Martín, Aeopas y otros organismos similares en otros países de la UE propugnan que el agua sea gestionada por las administraciones públicas y que los operadores públicos incorporen los principios del desarrollo sostenible en sus programas y actuaciones.

La unión de los operadores persigue además ejercer un espíritu de cooperación y colaboración entre ellos y propiciar el equilibrio territorial, ya que "la gestión de los servicios públicos municipales del ciclo integral del agua debe estar bajo el control de los representantes democráticamente elegidos por la ciudadanía", insistió el presidente del Consorcio.

Añadió que "la sensibilización y concienciación ciudadana respecto a los usos del agua se debe priorizar como responsabilidad de todos hacia una nueva cultura, hacia una responsabilidad compartida de un bien común: el agua. Los operadores públicos deben jugar un papel relevante en la consecución del acceso universal a los servicios de abastecimiento y saneamiento en el mundo".

El consorcio

El Consorcio Provincial del Agua nació como un instrumento para facilitar a los ayuntamientos pequeños la puesta en marcha y el mantenimiento de las estaciones depuradoras. En la actualidad, el Consorcio gestiona 38 Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) que depuran anualmente un volumen de 6.140.030 metros cúbicos de agua.

La mayor parte de municipios consorciados en la actualidad se concentran en La Axarquía, unos 17, pero las previsiones de expansión en los próximos años se centran sobre todo en la comarca de Ronda, donde el mapa de depuración está más retrasado.

Los servicios que se prestan son el mantenimiento de depuradoras y de las instalaciones de bombeo de aguas residuales, la realización de analíticas de vertidos y fangos, seguimiento de los consumos de agua potable en los municipios asociados y asesoramiento en materias relacionadas con el ciclo integral del agua.

El ente está adecuando sus estatutos a la futura Ley de Aguas de Andalucía para funcionar como entidad supramunicipal, y trabaja en la mejora de la eficiencia energética de las instalaciones de depuración y en una mejor integración ambiental de las estaciones en el entorno, así como seguir progresando en la implantación de nuevas tecnologías. La financiación de este organismo corresponde al 50 por ciento a la Diputación y el restante, al conjunto de los municipios consorciados.

Este recurso, "es cada vez más precioso", ya que, según sentenció Martín, el contexto de crecimiento demográfico, la expansión urbanística, el modelo de turismo y ocio y los usos agrícolas e industriales del agua, "están provocando la contaminación y la disminución de los recursos hídricos".