En nota de prensa, Ecologistas explica que el pasado 27 de noviembre de 2009, el Diario Oficial de Castilla-La Mancha publicaba el Decreto con el nuevo Plan de Gestión de Residuos Urbanos de Castilla-La Mancha y que en él se incluye una Disposición derogatoria del Decreto 70/1999, de 25 de mayo, por el que se aprobó el Plan de Gestión de Residuos Urbanos de Castilla-La Mancha anterior.

Afirma que en el nuevo Plan no se hace referencia ni a la necesidad, ni a la previsión de un nuevo vertedero para el Área de Gestión número 7 (Toledo-Centro Norte) y tampoco a donde se deberían ubicar nuevos vertederos en caso de ser necesarios.

Entre otras cosas "elimina la obligación establecida en el Plan anterior de que el vertedero provincial se deba ubicar en el municipio de Toledo". "En ninguna de las 280 páginas que componen el Decreto se menciona tampoco que quede algo pendiente de ejecutar del plan anterior, ni se recoge ninguna partida presupuestaria para dicho fin", subraya.

En conclusión, según la asociación, el nuevo vertedero ha quedado en un "limbo" entre el Plan antiguo y el Plan nuevo, lo que "abre la vía para que se pueda valorar de nuevo su situación partiendo de cero, en particular en lo que al emplazamiento se refiere". INDEFINICIONES

Ecologistas en Acción considera que estas "indefiniciones" del texto del nuevo Plan "abren la posibilidad tanto a que se mantenga el vertedero actual con su planta de tratamiento como a que, si de verdad es necesario un nuevo vertedero, se busque el emplazamiento más adecuado en el municipio de Toledo pero sin descartar el resto de la provincia".

Por ello, emplaza a las administraciones involucradas y en especial al Consorcio de Servicios Medioambientales a que hagan un nuevo estudio de alternativas que cumpla con la legalidad, asunto sobre el que los Tribunales se han pronunciado recientemente.

"La basura de la provincia se debe gestionar prioritariamente en el municipio que más genera y que sólo la ausencia de alternativas viables y un acuerdo institucional podría permitir valorar otros municipios distintos del de Toledo. Lo que no es de recibo es que el emplazamiento del vertedero se haya decidido en función de los intereses de los promotores inmobiliarios y no de los de la ciudadanía y del medio ambiente y que a día de hoy se vea cada vez más oscura la salida a este conflicto", concluye.