Dados de alta 20 de los 27 niños ingresados por intoxicación por monóxido de carbono en una guardería

Siete menores y dos adultos permanecen en diferentes hospitales y se espera que sean dados de alta en las próximas horas

El director del Hospital Virgen del Camino, Fernando Boneta, informó esta tarde de que han sido dados de alta 20 de los 27 niños ingresados por una intoxicación leve por monóxido de carbono en una guardería de Mutilva Baja.

El suceso tuvo lugar hoy, sobre las 12.20 horas, en la guardería Kuluxka, situada en la Plaza Idoi, número 4, de Mutilva Baja (Valle de Aranguren). Según Boneta, "al parecer la causa ha sido una mala ventilación de una caldera de calefacción".

Al Hospital Virgen del Camino fueron trasladados 26 niños, 12 chicas y 14 chicos, de edades comprendidas entre 6 y 35 meses. De ellos, según Boneta, han recibido el alta 20 y "al resto se les están realizando controles y se espera que sean dados de alta a lo largo de esta tarde".

Hasta urgencias de este hospital también se derivó a dos mujeres de 33 años. "Una de ellas ya ha sido dada de alta y la otra se encuentra en observación", informó Boneta. Asimismo, la Clínica Universidad de Navarra atendió a una niña de 24 meses que, según indicó, recibirá el alta a lo largo de esta tarde.

Por otro lado, cinco personas fueron trasladadas al Hospital de Navarra, cuatro mujeres de entre 25 y 44 años, y un hombre de 45 años. De ellas, "una mujer de 44 años queda ingresada en observación por ahora", indicó.

La Agencia Navarra de Emergencias, tras ser alertada del suceso a las 12.21 horas, movilizó cuatro ambulancias, dos de ellas medicalizadas. Además, acudieron al lugar del suceso patrullas del Área de Seguridad Ciudadana de la Policía Foral y la Policía Municipal del Valle de Aranguren. La Policía Judicial de Policía Foral se encarga de la investigación del suceso.

"una fortuna importante"

Por su parte, el jefe del servicio de Pediatría del Hospital Virgen del Camino, Enrique Bernaola, destacó la importante de que los trabajadores del centro se hayan dado cuenta pronto del problema. "Ha sido una fortuna importante, porque si no, estaríamos ante una tragedia de dimensiones difíciles de calcular", aseguró.

Según relató, "un adulto, que estaba cerca de la fuente de monóxido de carbono, fue el que levantó la alarma, al tener una pérdida de conciencia". "Afortunadamente, la situación de los niños ha sido relativamente buena; prácticamente todos tenían un nivel de intoxicación levemente moderada, entre un 20 y un 25 por ciento", indicó.

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