El alcalde de Ribes de Freser, Marc Prat (CiU), se mostró en desacuerdo con la distribución propuesta. Calificó de error que la Vall de Ribes y toda la comarca se contemplen dentro de la veguería de Girona. "No por sentimiento de pertenencia —matizó—, pero si queremos que sea un éxito y aproximar la administración a la ciudadanía, la Vall de Ribes tendría que estar en otra vegueria, con Vic".

El alcalde expuso que el territorio ha creado unas dinámicas y unas relaciones que se tendrían que tener en cuenta. "Por lógica y coherencia, Vic sería una buena capital de veguería, donde nosotros nos sentiríamos representados", matizó.

Explicó que la Vall de Ribes siempre ha estado más encarada a Barcelona, por comunicaciones como el eje Vic-Olot, la Universitat de Vic a 25 minutos en coche, y por el servicio de tren. "Lo bueno sería una veguería al lado de casa", puntualizó.

En cambio, la alcaldesa de Ripoll, Teresa Jordà (ERC), destacó que la iniciativa le parece bien, porque "ya era hora de que alguien tomara la responsabilidad de la distribución territorial. Es un hecho que contempla el Estatut, y por tanto tenía que hacerse", concluyó.

Asimismo, el alcalde de Camprodon, Esteve Pujol (PSC), se mostró "totalmente de acuerdo" con la iniciativa, ya que la Vall de Camprodon tiene un "fuerte sentimiento de pertenecer a Girona. Por sentimiento y relación con el resto de municipios, nuestro sitio es Girona", matizó.

El Govern aprobó hoy el proyecto de ley que divide Catalunya en siete veguerías, una nueva organización territorial que deberá convivir con las provincias, que se mantendrán como división territorial del Estado y circunscripción en las elecciones generales, explicó hoy en rueda de prensa el presidente de la Generalitat, José Montilla.

Las siete veguerías son Alt Pirineu i Aran —que incorpora Val d'Aran, pese al rechazo de esta comarca a formar parte de cualquier división territorial que no sea ella misma—, Barcelona, Catalunya Central —cuya capital está por concretar—, Girona, Lleida, Terres de l'Ebre —con capital en Tortosa— y Camp de Tarragona, cuya capital será Tarragona dejando atrás a las aspiraciones del Ayuntamiento de Reus.