El atún rojo, el lince ibérico, el alcornoque o el oso pardo son algunas de las diez diez especies españolas amenazadas que requieren una protección más urgente, según señaló este lunes la organización ecologista WWF, coincidiendo con el Año Internacional de la Biodiversidad y con motivo de la Conferencia Europea que se inaugura este martes en Madrid.

Completan la lista el esturión, el águila imperial ibérica, el desmán del Pirineo, la cerceta pardilla, el ferreret y el urogallo cantábrico.

Así, WWF reclama un impulso de las políticas de conservación de la naturaleza, como la aplicación de las leyes de Patrimonio Natural y Biodiversidad, o la Ley de Desarrollo Rural. Este objetivo, según esta organización, implica aprobar las directrices para la gestión de Red Natura 2000, en la que están incluidas gran parte de las especies más amenazadas de España.

Políticas contrarias

España es, según WWF, uno de los países más ricos en biodiversidad de la UE, aunque consideran que las políticas que se están desarrollando son "absolutamente contrarias a la consecución de este objetivo y la situación es cada vez más dramática".

Los datos de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) señalan que cada año se extinguen en el planeta entre 10.000 y 50.000 especies; y en la última edición de la Lista Roja de Especies Amenazadas de la UICN, de las 47.677 especies evaluadas, 17.291 están en peligro de extinción (el 36%).

Para Luis Suárez, responsable de Biodiversidad Terrestre de WWF España, "estamos ante una dramática pérdida de biodiversidad, tanto que los expertos hablan ya de la sexta extinción masiva de especies, la primera causada por el ser humano".