La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo acordó el miércoles el archivo de la causa por desobediencia abierta contra el actual lehendakari y su antecesor, Juan José Ibarretxe, entre otros dirigentes, por las reuniones mantenidas con la ilegalizada Batasuna durante la tregua de ETA en el año 2006.

López, tras reunirse en Vitoria con el presidente del Principado de Asturias, Vicente Álvarez, explicó que ha recibido la decisión del Alto Tribunal "con absoluta tranquilidad", ya que era una decisión "esperada". "Siempre había dicho que esto iba a quedar en nada y así ha sido", destacó.

El presidente del Gobierno autonómico recordó que "ya había anunciado" que afrontaba esta situación "con absoluta tranquilidad, convencido de que no había nada punible en nuestra actuación; porque nada puede haber delictivo en el intento de conseguir la paz y la libertad en un país, que es la prioridad absoluta de la ciudadanía".

"Eso lo acaba de determinar la Justicia. Es motivo de satisfacción porque acaba un proceso que nunca debió empezar", añadió el lehendakari.