Fomento quiere salir victorioso de su particular campo de batalla: bajar "los extraordinarios sueldos" de los controladores aéreos, tan abultados por "la acumulación de horas extra que se pagan a precio de oro", señaló ayer el ministro José Blanco.

"Los ciudadanos deben saber la verdad, y la verdad no debe ofender a nadie", enfatizó Blanco. El enfrentamiento es total. Fomento no se cansa de recordar que la negociación del nuevo convenio (el que hay data de 1999 y fue firmado por el ex ministro Rafael Arias-Salgado, PP) debe servir para bajar los salarios de los controladores, los mejor pagados de Europa y los menos productivos.

Los 2.400 controladores que trabajan en España cobraron en 2008 (últimos datos) 334.000 euros de salario medio. El objetivo de AENA es que esa media se reduzca a los 200.000 euros, un 40% menos.

La fórmula para bajar los salarios es eliminar las horas extra, lo que realmente engorda las nóminas. Estas horas extra, que en muchos casos suponen más del 50% del sueldo total, han permitido, por ejemplo, que 713 controladores cobraran entre 360.000 y 540.000 euros; otros 135, más de 600.000; y 28, más de 700.000.

Sin horas extra

Para Fomento, las horas extra son el gran chollo de los controladores. Si una hora normal se paga a 184 euros, la extra representa 423 1.

La clave es modificar el convenio, que se está negociando. El actual regula que los controladores sólo pueden trabajar 1.200 horas obligatorias. El resto ya son extra. Fomento quiere que la jornada anual pase de esas 1.200 horas a un tramo que oscile entre 1.500 y 1.600 horas fijas, sin horas extra. Fomento incide en que un sueldo de 200.000 euros ya es importante, superior a lo que gana un controlador alemán (158.000 euros) o uno británico (120.000 euros).

Automatizar el control aéreo de 12 aeropuertos, otro de los objetivos de Fomento, conllevaría una mejor redistribución de la plantilla de controladores y reduciría así las horas extra que hacen. Esa automatización, según AENA, podría comenzar en los aeropuertos canarios de El Hierro y La Gomera.