Las delegaciones de los 192 países que participan en la Cumbre del Cambio Climático en Copenhague (Dinamarca) recibieron este viernes un primer borrador de acuerdo para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y limitar el aumento de la temperatura del planeta hasta el año 2050, un texto que ha servido para acercar las posiciones negociadoras en el encuentro.

El documento plantea reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) hasta un 95% en 2050 y limitar la subida de la media global de temperatura en la Tierra entre 1,5 y 2 grados.

Además, los países industrializados como grupo deberán reducir las emisiones de CO2 entre el 75% y más del 95% hasta 2050, comparado con los niveles de 1990, según el borrador.

Sin embargo, el documento no menciona el carácter vinculante que deberá tener el documento final que se firme en la capital danesa, como precisó este viernes el jefe de la delegación de la UE en la conferencia, Anders Turesson, quien consideró alentador el borrador, aunque éste no refleje los mecanismos por los que se deberá limitar el incremento de la temperatura a dos grados.

Un cambio de dirección

El secretario ejecutivo de la conferencia, Yvo de Boer, señaló que el documento supone "un cambio de dirección" en las negociaciones, pero advirtió de que falta aclarar la cuestión de la financiación para los países en desarrollo para su adaptación a las consecuencias del cambio climático.

De Boer comentó que la reacción de las delegaciones al borrador "había sido constructiva" y que todos habían mostrado voluntad por trabajar con este texto, aunque dijo que había habido "serias reservas" al respecto. Descartó en principio la presentación de nuevos textos de la presidencia danesa este fin de semana, cuando llegarán los ministros de Medio Ambiente y altos cargos oficiales para entrar en la fase final de las negociaciones.

En los últimos tres días de la cumbre, que concluirá el día 18, más de un centenar de jefes de Estado y de Gobierno ultimarán un acuerdo vinculante sobre la reducción de las emisiones de CO2 que, de fracasar, obligaría a proseguir con las negociaciones el año próximo.

Los países ricos deben suministrar, según el borrador, recursos "nuevos y adicionales" hasta 2012, cuando expira el Protocolo de Kioto, al que se acogieron 37 países industrializados y que deberá ser sustituido por un acuerdo vinculante negociado en Copenhague o más tarde.