Tras conocer la familia de su novio y realizar labores humanitarias, Madonna y el modelo brasileño Jesús Luz continúan disfrutando de Río de Janeiro. La cantante se mostró muy sonriente a la salida del restaurante japonés Yume en el Barrio Jardín Botánico de la ciudad carioca.

Eso sí, frente a su aparente felicidad destacan algunas quejas de sus fans, como la de uno de ellos, que se quejó a la salida del restaurante de que había sido zarandeado por un escolta de la artista.

No es la única polémica en la que se ha visto envuelta Madonna en tierras brasileñas. Hace tan sólo unos días una ONG llamada AfroReggae acusó a la cantante de haberles dejado plantados, ya que según afirmaban había quedado en visitarles.

La asociación AfroReggae afirmó entonces que la cantante se había echado para atrás cuando supo que la visita incluía internarse en un barrio de favelas, e incluso visitar una de ellas.