El aviso de un experto en seguridad a los que dejan la llave puesta por la noche: "Puede ser contraproducente"

Uno de los hábitos más comunes que existen en una vivienda tiene lugar cuando se acerca la noche.
Uno de los hábitos más comunes que existen en una vivienda tiene lugar cuando se acerca la noche.
Uno de los hábitos más comunes que existen en una vivienda tiene lugar cuando se acerca la noche.
Un hombre introduce una llave en la cerradura de la puerta de una vivienda.
Eduardo Parra - Europa Press - Wochit

Uno de los hábitos más comunes que existen en una vivienda tiene lugar cuando se acerca la noche. Son muchas las personas, vivan solas o acompañadas, las que deciden cerrar con llave la puerta principal de su casa y dejarla puesta hasta la mañana siguiente. Sin embargo, la sensación de seguridad que este gesto puede llegar a causar no existe en realidad y puede incluso llegar a ser una rutina peligrosa.

Así lo ha advertido Samuel Prieto, experto del Instituto Superior de Seguridad Pública (Netpol), en una entrevista en El Panda Inversor. Dejar la llave echada por las noches "no aporta más seguridad", indica. Es más, avisa de que "puede ser incluso contraproducente".

Prieto ha explicado que en buena parte de los países de Europa, ese tipo de cierres que permiten dejar la llave puesta por dentro están prohibidos. "El bombín de embrague simple, que si yo dejo la llave puesta por dentro y girada no pueda abrir desde fuera, no está permitido", sostiene.

El problema reside cuando la persona que ha echado la llave por dentro  tiene un problema médico. "Una situación que se ve muy a menudo es la teleasistencia de personas mayores", indica Prieto. El servicio de teleasistencia "guarda un juego de llaves del domicilio de esa persona que tiene el aparato", y si se ha caído y no se puede levantar, o cualquier otro problema, "le da al botón" para que vengan a socorrerle.

"Llega la teleasistencia, y se encuentra que las llaves están puestas por dentro y que no pueden acceder", continúa, de ahí que "pueda ser contraproducente".

Del mismo modo, Prieto ha insistido en que dejar la llave por dentro "no aporta más seguridad", ya que existen "métodos relativamente sencillos que podrían llegar a abrir una puerta con la llave puesta por dentro", como pueden ser con la sobreimpresión o la técnica de bumping, enumera este experto.

Según Prieto, esta práctica "no aporta más seguridad", especialmente en el caso de los bombines de embrague simple, que son los más baratos. "Los bombines de gama media-alta vienen en su mayor parte con un embrague doble, y si no, con la opción de ponerle un embrague doble, de modo que con la llave puesta por dentro y girada se puede abrir por fuera", sostiene.

Por último, "un bombín bueno ya tiene los elementos suficientes, como pueden ser los detectores de llave, elementos interactivos que van a evitar esos tipos de abertura, como el bumping o la impresión", asegura.

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