El Ayuntamiento de Barcelona prevé empezar las obras de ampliación del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (MACBA), que contempla un nuevo edificio en la plaza dels Àngels, en el mes de noviembre, a pesar del descontento que genera entre los vecinos del Raval, que denuncian que se perderán casi 1.000 metros cuadrados de espacio público.
La Comisión de Gobierno del consistorio ha aprobado inicialmente este miércoles el proyecto, que cuenta con una inversión de 13,8 millones de euros y que prevén que esté finalizado en enero de 2027. Con este trámite, se abre un período de exposición pública de 30 días hábiles. Una vez finalizada y superada la aprobación definitiva, sería posible licitar las obras en junio y activar la maquinaria en noviembre.
El proyecto corre a cargo del estudio UTE Harquitectes y Christ & Gantenbein, ganadores del concurso público organizado por el Consejo General del MACBA. Contempla la transformación del edificio "contrafuerte" de Clotet-Paricio para convertirlo en parte del museo y la definición del patio del ábside. "Con la propuesta arquitectónica, se mantienen espacios de transición entre el edificio patrimonial y el nuevo edificio de ampliación, respetando distancias y poniendo en valor los edificios patrimoniales", aseguran desde el consistorio.
Más espacio para obras y una terraza pública
El nuevo edificio del museo contará con 2.110 metros cuadrados de nuevas salas de exposición, galería, almacenes e instalaciones, que permitirán poder exponer un mayor número de obras del fondo permanente y de la colección, que actualmente cuenta con casi 6.000 piezas.
También se adecuarán los espacios del Convent dels Àngels como espacios expositivos y se ganarán para el uso ciudadano 349 metros cuadrados de mirador abierto en la cubierta del nuevo edificio.
Reforma de la Plaça dels Àngels
La ampliación del MACBA forma parte de la reforma de la Plaça dels Àngels, que también contempla la construcción de un nuevo CAP Raval Nord en la antigua Capella de la Misericòrdia y la remodelación de los espacios de la plaza, con más verde y zonas de descanso para los vecinos.
La finalización de las obras está prevista para 2027 y ha provocado la indignación de los 'skaters'. La operación elimina el zócalo que actualmente utilizan para patinar y, en el proyecto, no se contempla ningún espacio específico para ellos.
A principios de marzo, el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, aseguró que el fin de la remodelación no es quitar espacio a los patinadores, sino “recuperar espacios públicos para la ciudad” y hacerla más "inclusiva", sin excluir a nadie de la plaza, en referencia a los patinadores.
Asimismo, sostuvo que debe haber "espacio para las personas mayores y espacios jugables" y defendió que un espacio "no se puede monopolizar a un solo uso".
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