El supuesto pacto entre dos monjas en Chile ha conmocionado al país. La Policía investiga a una religiosa que mantuvo durante un año el cuerpo sin vida de su amiga y después se deshizo de él abandonando en la calle sus restos en el interior de una maleta.
Según ha adelantado Antena 3, la mujer fue captada por cámaras de seguridad transportando la maleta por la localidad de Ñuñoa, en Santiago de Chile. Más tarde, la Policía recibió un aviso de que se había encontrado una maleta sospechosa y, al acudir, descubrieron que dentro había un cadáver.
Según contó esta religiosa, ella y su amiga llegaron a un acuerdo por el que no denunciarían nunca la muerte de la otra y mantendrían en el domicilio los restos en caso de fallecimiento. Además, esta monja se encargó de cuidar a su amiga, que padecía un enfermedad y tenía 80 años en el momento de su muerte.
Según el mencionado medio, que cita a fuentes de la Fiscalía, el cuerpo de la mujer fallecida no presentaba signos de violencia, por lo que la Policía ha determinado que fue una muerte natural sin participación de terceras personas.
Junto a la maleta, la monja también dejó un bolso con el documento de identidad de su amiga. Ahora, la religiosa podría enfrentarse a una pena de entre 61 y 541 días de cárcel.
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