Foment del Treball pide que Cataluña deje de ser un "infierno fiscal" y que se elimine el Impuesto de Patrimonio

Diferentes miembros de Foment de Treball.
Diferentes miembros de Foment de Treball.
Lluís Sibilis / ACN
Diferentes miembros de Foment de Treball.

La patronal Foment del Treball ha pedido que Cataluña deje de ser un "infierno fiscal" a través de 80 propuestas "orientadas a combatir la excesiva carga fiscal que sufren las empresas y los ciudadanos". Así lo ha explicado el presidente de Foment, Josep Sánchez Llibre, este martes en la presentación del Libro Verde de la Fiscalidad de Cataluña, elaborado por una cincuentena de expertos. 

Sánchez Llibre ha remarcado que el análisis de Foment no recae en un "planteamiento ideológico" y que el objetivo es "poder influir en la Generalitat". Para ello, el presidente de la patronal presentará las propuestas para "combatir la carga fiscal" a los grupos políticos que se presentan a las elecciones del 12-M. 

Entre las principales medidas, Sánchez Llibre ha insistido en la supresión del Impuesto de Patrimonio porque con la regulación vigente "vulnera el principio constitucional de no confiscatoriedad".  Desde Foment se ha explicado que esta tasa "disuade la actividad económica". Otra de las medidas que ha señalado es la de elaborar un plan estratégico para "reducir la economía sumergida"

Cataluña como foco de inversión

"Queremos ser los primeros de la clase. Queremos que Catalunya sea la locomotora que polarice la inversión y la política en España", ha manifestado el presidente de la patronal. Para ello, Sánchez Llibre ha presentado acciones como reducir el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones en el 5%, reducir el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales al 4% para las viviendas habituales o bajar los tipos marginales del IRPF en Cataluña para "rentas altas (52%) y bajas (21,5%)". 

La competitividad fiscal en Cataluña

Por otro lado, el consejero de la presidencia de la entidad, Manel Silva, ha lamentado que "la competitividad del sistema fiscal de Catalunya es extremadamente reducida" y ha sostenido que hay una desproporción entre las aportaciones de la ciudadanía y las prestaciones y servicios públicos que reciben.

Silva ha asegurado que el sistema fiscal catalán -que incluye 11 impuestos propios- genera "una barrera importante y muy anticipada" de las inversiones en Catalunya y el establecimiento de nuevas empresas.

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