Cuando se anunció que Kim Kardashian sería parte del elenco principal de la nueva serie de Ryan Murphy, American Horror Story: Delicate, quedó claro que la socialité y empresaria estaba dando un paso de gigante en su carrera, dado que se trataba de un papel destacado en la ficción que le suponía todo un reto para estar a la altura.
Sin embargo, también estar a su lado ha supuesto todo un desafío para sus compañeros en el set de rodaje. Sobre todo para el actor Dominic Burgess, quien encarna al director Hamish Moss, que ha hablado sobre cómo fue realizar las primeras escenas de sexo de su carrera al lado de una mujer como Kim Kardashian.
Burgess tiene una escena en el último capítulo emitido de la serie con Siobhan Corbyn, una agente y publicista de éxito a quien interpreta Kimberly, y en ella ambos se encuentran en un momento poscoital en el que se explicita el poder que el personaje que encarna Kim tiene sobre el de Burgess.
El intérprete se ha sincerado para la revista Variety sobre los nervios que sentía por la escena, dado que sentía varias inseguridades con su cuerpo, aparte de tener que realizarla con un icono de la belleza como Kim, de quien admite que nunca había visto ninguno de sus realities, pero que sí sabía de la importancia de su figura en la cultura popular.
"Alguien de su posición podría sencillamente estar todo el tiempo en su camerino y salir solo cuando fuera necesario, pero ella estaba muy presente en el rodaje: hacía preguntas, compartía sus ideas y era muy abierta y simpática con todo el mundo", ha comenzado Burgess.
Este último comentario le ha servido precisamente para explicar como Kim se mostró muy comprometida con que él se sintiese más tranquilo antes de rodar su escena. "Me cautivó", ha recordado entre risas, "¡Nos pusimos a hablar de viajes, espectáculos de Broadway y hasta de Shania Twain!".
Y, por supuesto, Burgess ha puntualizado que le conquistó del todo por ser tan atenta y tan gentil al saber que también era su primera escena de sexo y, sobre todo, por desnudarse frente a la cámara junto a una de las consideradas mujeres más bellas del planeta. "Yo estaba muy nervioso, porque soy consciente de mi cuerpo, y saber que mi primera escena de sexo iba a ser con un ícono conocido precisamente por su belleza fue demasiado con lo que lidiar", ha admitido.
"Sin embargo, teníamos a un muy buen coordinador de intimidad que nos estuvo preguntando con qué nos íbamos a sentir más cómodos, y tanto el director era John J. Gray, con quien ya había trabajado en la serie Feud, como Kim fueron maravillosos conmigo. Acabó siendo incluso una experiencia de verdad muy placentera", ha finalizado.
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