La isla de Taiwán ha amanecido este miércoles bajo el temblor de un potente terremoto de magnitud 7,4 grados en la escala de Richter, el más fuerte registrado desde 1999 en el país; un seísmo que ha provocado la muerte de al menos cuatro personas y ha dejado cerca de 60 heridos.
Durante una hora y media, el terremoto ha sacudido calles, edificios, carreteras y playas, después de que el sismo se iniciase en las costas del país insular y obligase a activar las alertas de tsunami, en torno a las 7:58 horas del miércoles (23:58 horas GMT del martes), a 25 kilómetros al sureste del condado oriental de Hualien, la zona más afectada.
El seísmo ha dejado imágenes muy impactantes de los daños causados y el intenso pánico vivido por la población taiwanesa. Entre ellas, destaca la emisión en directo en un programa informativo de la televisión taiwanesa, que ha obligado a cortar la retransmisión.
En el vídeo, se puede ver cómo la imagen se tambalea y la presentadora pierde el equilibrio. Después de un breve corte, aparecen decenas de focos moviéndose bruscamente mientras otra presentadora, apoyada en la pantalla, informaba de la situación.
Este episodio se suma a los más de 900 incidentes relacionados con el desastre, entre ellos 150 incidentes de infraestructura civil y 97 de daños a edificios.
El terremoto y sus sucesivas réplicas provocaron cuantiosos daños materiales, especialmente en la zona de Hualien, donde numerosos edificios e infraestructuras se han visto afectados y al menos dos bloques de viviendas están parcialmente colapsados, y también ha provocado el cierre de varias carreteras, lo que ha dejado a numerosas personas y vehículos atrapados.
Además, la mayor productora de semiconductores del mundo, la Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC), se ha visto obligada a evacuar a parte de los empleados de sus instalaciones, cuyos sistemas de seguridad “están funcionando correctamente”.
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