OPINIÓN

Elitistas

  • Consulta todos los artículos escritos por Jaume Barberà en nuestra página web.
Luis Montenegro, candidato de centroderecha en las elecciones de Portugal.
Luis Montenegro.
Carlos Gámez
Luis Montenegro, candidato de centroderecha en las elecciones de Portugal.

John Carling, escritor y periodista, daba en el clavo en uno de sus recientes artículos. Decía el periodista, autor, entre otros, del libro 'Invictus', y amigo en su día de Nelson Mandela, que la “sordera elitista mata a la izquierda”. Así, como lo leen.

“Los radicales, los herederos de Marx… los camaradas habitan torres de marfil, lejos de lo que ocupa las mentes de las clases populares que pretenden representar”.

Desde esta misma página se ha estado diciendo lo mismo en muchos artículos. Los burócratas, altos funcionarios o no de la izquierda hiperideologizada, pergeñan e intentan imponer su sociedad ideal, sabedores como son que en lo substancial se ha fracasado: el capitalismo continúa hoy más vivo que ayer.

No quieren ver la realidad. Se niegan a aceptarla. Ven como caen gobiernos de izquierdas en todo el mundo, ven como las derechas civilizadas y liberales retroceden en beneficio de sus franquicias más radicalizadas, autoritarias e iliberales.

¿Cómo es que los que pretenden representar les dan la espalda?, ¿cómo es que votan a formaciones que ponen en duda que haya cambio climático, que haya violencia machista, que se oponen a la igualdad de género, que no quieren que haya carriles para las bicicletas, que haya lenguaje inclusivo, que haya… lo que ustedes quieran?

El pasado domingo, en Portugal hubo sorpresa. Los socialistas, que hace dos años consiguieron mayoría absoluta y avanzaron las elecciones para cortar de raíz casos de corrupción, quedaron segundos en beneficio de la derecha y de la ultraderecha, que cuatriplicó sus resultados.

No hace mucho, la progresía española solía decir aquello de “menos mal que nos queda Portugal”, por aquello de que el país vecino es una república y que la ultraderecha era insignificante.

No creo que Portugal deje de ser república, pero sus electores han aupado a los ultraderechistas a la tercera posición. Espectacular y preocupante.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento