La casa real británica está haciendo frente a uno de los periodos más difíciles de su historia reciente. Si para la reina Isabel II 1992 fue su famoso annus horribilis, este 2024 también va a ser recordado por la institución con dolor.
El rey Carlos III está haciendo frente a un cáncer que le fue detectado en enero; la princesa de Gales, Kate Middleton, está siendo objeto de numerosas especulaciones debido al secretismo con el que el Palacio de Kensington está abordando su recuperación de una cirugía abdominal a la que fue sometida también en enero y que resultó ser más grave de lo que parecía.
Guillermo de Inglaterra se ha visto obligado a disminuir su agenda para estar con su mujer, y la reina Camila, sobrepasada y "agotada", se encuentra ahora mismo de vacaciones ante la gran cantidad de compromisos que ha tenido que adquirir a sus 75 años como consecuencia de la situación.
A todo ello se une el siempre tan polémico príncipe Harry, que desde que se marchó a vivir a EEUU con su esposa, Meghan Markle, no para de generar problemas a la casa real. La publicación de su libro, el estreno de su documental en Netflix y las sucesivas y explosivas declaraciones han amenazado la estabilidad de la institución. Ahora, un nuevo escándalo protagonizado por el hijo menor de Carlos III vuelve a sacudir sus cimientos.
Unos calzoncillos de 250.000 dólares
A Harry le persigue su pasado fiestero y desenfrenado. Hace unos días, The Sun informaba de que unos calzoncillos que el príncipe utilizó hace 12 años en una noche loca en Las Vegas en la que acabó medio desnudo habían sido subastados por 250.000 dólares. La prenda, según el medio británico, habría sido adquirida por el dueño de un bar de striptease de San Diego llamado Dino Palmiotto.
"Quiero esos calzoncillos para mi club. Un santuario en mi club es el hogar perfecto para ellos (...) No veo esto como una falta de respeto. Es un recordatorio de una época en la que él era el príncipe de las fiestas y eso no tiene nada de malo'', confesaba Dino Palmiotto.
Un chantaje para ganar "un par de millones"
Por otro lado, esa noche loca en Las Vegas puede traer más problemas aún a Harry. Y es que una exdominatriz llamada Carrie, presente en la fiesta esa noche de 2012, amenaza ahora con publicar en Only Fans fotografías del príncipe desnudo.
La mujer de 52 años ha explicado, también al periódico The Sun, que Harry "se quitó los calzoncillos mientras bailaba con strippers y tocaba la guitarra eléctrica con un taco de billar''. Ya hace años se publicaron instantáneas de él en las que aparecía desnudo abrazando a una mujer, pero según Carrie esas no serían las únicas.
"Estas fotografías nunca han sido vistas por el público. Tengo fotos junto a la piscina de antes de la noche en cuestión y fotos de Harry desnudo. La gente se sorprenderá. Nunca antes había publicado estas fotos por respeto. Ahora no importa. Es un maldito idiota", ha explicado la mujer en The Sun.
Más allá del escándalo que eso supondría, muchos se preguntan cuál es la motivación para que Carrie desempolve las fotografías justo ahora. "Estoy un poco enfadada por haber sido borrada de su libro (...) Me sorprende que recuerde el nombre de alguien porque estaba bastante ebrio, pero podría haber hablado de las pocas cosas que pasaron entre nosotros. Harry era tan amante de la diversión y espontáneo... Creo que Meghan le quitó la vida, ahora es aburrido", ha explicado ella misma, quien espera ganar con esto al menos "un par de millones".
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