Julián Contreras ha roto su silencio. Casi un mes después de que Aránzazu, su excasera, denunciara públicamente la situación de impago que arrastra con él desde la pandemia, el hijo menor de Carmina Ordóñez ha anunciado que tomará acciones legales contra ella por "difamación".

Al parecer, tanto Julián como su padre estuvieron viviendo de alquiler durante años en una vivienda, situada en Móstoles (Madrid), por la que dejaron a deber una ingente cantidad de dinero. "La cifra está más cerca de los 30.000 euros", aseguraba la excasera que, supuestamente, les desahució en febrero de 2023, tras dos años de impago. 

Sin embargo, esto no sería así. "Quiero dejar claro que la situación no es, en absoluto, la que se está contando", ha comenzado diciendo el hermano de Fran Rivera en declaraciones a Europa Press. "Yo estoy padeciendo una difamación que no es justa y que estoy abordando tanto legal como judicialmente, que es como hay que hacer las cosas".

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A su juicio, lo que se está haciendo contra él "es injusto, indecente y tendrá sus consecuencias legales", por lo que ha querido recalcar que será "en el juzgado" donde hablará. En este punto, ha aprovechado para lanzar un dardo a la que fuera la casera de su vivienda de Móstoles. "Lo que no se puede hacer es en un plató de televisión buscar lo que no se consigue en los juzgados. Es miserable y no se puede consentir, ha sentenciado. 

Y es que, tal y como él mismo ha señalado, él es la víctima de toda esta situación -"Yo soy el que vive difamado por esto"-, hasta el punto de que le ha comenzado a pasar factura en su búsqueda de vivienda.  "Tú imagínate la publicidad que es esto. Ahora me quiero mudar y me piden un año por adelantado. Y eso es una barbaridad, es injusto si no ilegal", ha denunciado, pidiendo a la gente que empatice con lo que está viviendo.