Cataluña lleva ya varios días en emergencia por sequía, tratando de adaptarse a la nueva realidad en las actividades económicas, a los parques secos, las fuentes sin agua y las duchas cerradas en los centros deportivos. Sobre este preocupante asunto ha reflexionado el economista Santiago Niño Becerra a través de un hilo en Twitter, donde ha aventurado un futuro próximo que no es nada positivo.

En concreto, Niño Becerra se ha referido a una noticia vista en TV3, en la que aseguraban que "en Cataluña se pierde el 25% del agua por las fugas existentes en la red". Ante esto, plantea: "¿No hubiese podido con tiempo abordarse ese problema?".

Respecto a esta situación crítica y la acción de los gobiernos, el experto es pesimista. "Pienso que así estaremos varios meses. Imaginen el estado de ánimo de la ciudadanía y de las empresas con actividades consumidoras de agua. Los ánimos se irán caldeando a medida que vaya haciendo más calor", ha apuntado.

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Al llegar a ese punto, prosigue, "se anunciarán inversiones de choque y continuadas en el tiempo que prometerán resolver el problema y dejar de depender del agua que caiga-del-cielo (porque cada vez lloverá menos)". Estas inversiones "podrán ser, en parte, privadas", ha matizado al respecto. En el caso de que lloviera, "las restricciones se suavizarían".

El economista está convencido de que "dentro de dos años este problema habrá desaparecido", pero habrá otro problema: "El precio del m3 de agua será muy superior al que ahora es. Podría establecerse una facturación por escalones con un mínimo a precio actual".

En resumen, "solución hay", indica Niño Becerra, "pero pagando", puntualiza. El experto cree que si no se ha implementado antes "ha sido porque la opinión pública no estaba preparada para aceptarla". 

Ante esta situación, llega su "triste" vaticinio: "Vamos a pasar dos años muy fastidiados con implicaciones colaterales: turismo, agricultura, hostelería", ha enumerado.