Más de un mes después de que Genoveva Casanova fuera pillada paseando y pasando la noche en su casa de Madrid con el heredero danés, Federico, hechos que fueron difundidos por la revista Lecturas mediante una completa serie fotográfica, el tema todavía sigue generando muchas noticias.
Desde que ese material salió publicado, Genoveva inició una especie de huida de Madrid, donde vive y donde se vio con Federico. Hay que recordar que ambos pasearon por El Retiro, cenaron en un conocido restaurante de la capital hasta la 1 de la mañana (fueron los últimos en salir del establecimiento, ya con las luces apagadas) y durmieron en la casa de ella, un lujoso piso que paga Cayetano Martínez de Irujo, exmarido de Genoveva.
Tras salir a la luz las fotos, Genoveva se fue a San Sebastián, al palacio de su exmarido. Posteriormente, viajó a Londres, donde viven sus mellizos, Amina y Luis.
Ahora, con motivo de las Navidades, se ha instalado de nuevo en Madrid, según Semana. La revista informa que este mismo domingo recibió la visita de su expareja y de su hija Amina. El hijo de la duquesa de Alba salió junto a su hija del domicilio de la mexicana, lo que, según la publicación, quiere decir que han cenando juntos.
Hace especial hincapié la revista sus gestos de preocupación e inquietud, que se reflejaban en sus rostros. Hace unos días, Cayetano reconoció estar muy preocupado por su exmujer: "Es la madre de mis hijos y la quiero", dijo.
Además de todo esto, y según informa Semana, Genoveva ha tomado una decisión muy importante. La mexicana está dispuesta a dar la cara y se estaría planteando romper su silencio para así pasar página.
Algo que, según la publicación, podría ser más pronto que tarde. Así, se enfrentará a las cámaras y hablará claro para poner punto final a las especulaciones.
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