Las autoridades francesas detuvieron este lunes a un hombre de 33 años acusado de matar a su mujer y a sus cuatro hijos menores de edad, cuyos cadáveres fueron encontrados por la noche en la localidad de Meaux, una población de la ciudad de París.
El hombre, que presenta problemas psicológicos, fue detenido en la casa de su padre, a unos 30 kilómetros de su vivienda y se encuentra ahora internado y bajo custodia policial. A la espera de testificar y ser juzgado, se enfrenta a una posible custodia perpetua, ¿qué se sabe hasta ahora?
¿Cómo ocurrieron los hechos?
Los cadáveres de las cinco víctimas fueron encontrados este lunes en su domicilio particular después de que una llamada de los vecinos alertara a las autoridades, que no podían contactar con la familia. Según ha señalado el fiscal Jean-Baptiste Bladier en una rueda de prensa, la mujer, de 35 años, y las niñas mayores, una de 10 y la otra de 7 años, recibieron múltiples cuchilladas y presentaban marcas de defensa. Los otros dos niños, de 4 años y 9 meses, habrían sido supuestamente asfixiados. Será ahora la autopsia la que determine las causas oficiales de sus muertes.
Una familia "ordinaria"
El detenido, que tenía el titulo de bombero, se había casado con su mujer hace apenas dos meses. Se trataba de su pareja desde hace 14 años y ambos se conocían desde la enseñanza secundaria. Según ha señalado el fiscal, el apartamento donde vivían era el de una "familia ordinaria" y en el momento en el que las autoridades accedieron a él no presentaba ningún indicio de "entrada violenta".
Posible cadena perpetua
El hombre, que fue detenido instantes después en la vivienda de su padre en Sevran Saint Denis, a unos 30 kilómetros de su casa, se enfrenta ahora a una posible cadena perpetua por estos hechos. Así, será imputado con los cargos de de homicidio voluntario de menores de quince años y el de homicidio voluntario del cónyuge. La duración final de su pena dependerá de si finalmente se establece una alteración parcial o completa del discernimiento.
Internado y bajo custodia
El acusado sufre varios problemas psicológicos y se encuentra por el momento internado y bajo custodia policial. Presenta varias heridas en una mano y aún no ha testificado, pero sí ha indicado qué conoce los motivos por los que "está bajo custodia" y ha declarado saber que "ha atacado a su familia". Además, ha hablado acerca de su "malestar personal" y su "depresión", condicionantes que la fiscalía tiene constancia que ocurren desde 2017.
Ya atacó a su mujer en 2019
Los episodios violentos dentro del matrimonio no eran nuevos. Tal y como han señalado las autoridades, el acusado tenía antecedentes por violencia de género tras haber atacado previamente a su mujer, a la que apuñaló en 2019. El suceso se produjo después de que el hombre hubiera parado su tratamiento médico. Los hechos motivaron que se le realizara un examen médico que determinó su "estado mental deficiente", con lo que el caso quedó archivado. En aquel momento su mujer no le denunció y tampoco aceptó la ayuda de una asociación de víctimas.
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