La apertura del testamento de Fernando Fernández Tapias, fallecido en Madrid el pasado 25 de octubre, ha sido uno de los momentos más destacados de la última semana. Una vez desvelado el contenido de este documento, se sabe que el millonario desheredó a sus cinco hijos mayores por maltrato sicológico.
Así lo confirmó la periodista María Eugenia Yague en LOC. También se ha sabido, por terceros, que su viuda y última mujer, Nuria González, está dispuesta a ejecutar la última voluntad de su marido, con el que llevaba casado 21 años.
Nuria González es la madre de los hijos pequeños de Fernández Tapias, quien tuvo seis con sus anteriores mujeres, Victoria de la Riva (4) y Juana Courel (2). La muerte en 2010 de su hijo Bosco sumió en una gran tristeza a Fernández Tapias, que a los pocos años conoció los intentos de sus otros cinco hijos por incapacitarle alegando razones de humanidad, "para protegerle", señalaron.
De Iván y Alma Carlota Fernández González se sabe más bien poco. Apenas han sido vistos, y solo las fotos obtenidas durante el tanatorio y funeral de su padre han permitido ver a dos jóvenes de elevada estatura y bien parecidos, muy unidos a su madre y muy tristes por la muerte de su padre.
La niña, menor de edad, todavía va a un colegio inglés, donde hizo su Comunión en 2016, que reunió a nombres entre los invitados como Alfonso Cortina, Alberto Ruiz-Gallardón y Florentino Pérez.
Iván, que pasó por el mismo, estudia en el Colegio Universitario de Estudios Financieros de Madrid (CUNEF), por donde también pasaron, entre otros, Alonso Aznar (hijo de José María Aznar) y los hermanos Carlos y Felipe Cortina (hijos de Alfonso Cortina y de Myriam Lapique).
Buen estudiante, discreto, muy cercano a sus padres y ajeno por completo a la polémica que ha suscitado el testamento de su padre, que le ha hecho, junto a su hermana, uno de los grandes benefactores. Así es este joven, amigo, por ejemplo, de las hijas de Patricia Cerezo y Ramón García. Al menos, Iván estuvo en la puesta de largo de la mayor, Natalia, cuando esta cumplió 18 años.
Iván tiene la misma edad que algunos nietos de Fernández Tapias, que son sus sobrinos, aunque las tensas relaciones entre sus cinco hermanos mayores con su madre, hacen pensar que no tienen actualmente trato alguno, como Iria, la que fuera nieta predilecta del naviero.
Cómo afrontarán su herencia es algo que no se sabe aún, dada su juventud, pero su madre ha dicho que se ocupará de cumplir con la voluntad de su marido y padre.
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