A partir del próximo 28 de noviembre, los títulos integrados de la T-usual, T-casual, T-grup y T-familiar se dejarán de vender progresivamente en formato de cartón con banda magnética y solo estarán disponibles con la T-mobilidad. El cambio principal se producirá de forma gradual en las máquinas de autoventa, que dejarán de imprimir los billetes antiguos con banda magnética y solo los ofrecerán con tarjetas T-mobilidad, recargables y con tecnología sin contacto.
Estos billetes estarán disponibles en las máquinas en un formato específico de cartón T-movilidad que no requerirá registro previo por parte de las personas usuarias y que costará 0,50€ (solo en la primera compra, después se puede recargar tantas veces como sea conveniente).
Como excepción, el abono T-usual en cartón T-movilidad tendrá un diseño específico que requerirá el DNI o el pasaporte en el momento de la compra al tratarse de un título personal e intransferible.
Por otro lado, en cuanto a las tarjetas de cartón antiguas se podrán seguir utilizando hasta que estas se agoten o hasta su caducidad, fijada el próximo 15 de enero.
La T-mobilitat: un sistema en diferentes formatos
Así, a partir del 28 de noviembre, se podrán adquirir cuatro modalidades de tarjeta T-mobilidad recargable y sin contacto, cada una de las cuales admitirá unos títulos integrados determinados:
Tanto la tarjeta personalizada de plástico como la disponible en la app para móvil, garantizan algunas ventajas respecto a los formatos de cartón que entrarán próximamente, como el de recuperar los viajes en caso de pérdida o robo, además de hacer otras gestiones personales en línea.
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